Comenzaron las tareas para la segunda prueba en caliente con vapor de origen no nuclear, que incluye la sincronización con la red eléctrica. El proceso tiene una duración aproximada de 19 días, en el cual se van a realizar alrededor de 120 pruebas de funcionamiento.
El objetivo de la prueba que está realizando la empresa Nucleoeléctrica Argentina S.A. (NA-SA) es alcanzar las condiciones de operación normal de la central. Para ello, la tarea requiere un total de 450 mil litros de agua en todo el sistema. Cuando esté cargado se procederá a sacar todo el aire del mismo. Luego, se calentará el agua y se llevará gradualmente a una presión de 114 bar y una temperatura de 278ºC, correspondientes a la presión y la temperatura de la central cuando esté en servicio. Una vez alcanzados dichos valores, se producirá vapor de origen no nuclear para impulsar la turbina, generando energía y conectándose a la red eléctrica por un lapso aproximado de 10 minutos.
Posterior a la finalización de este complejo ensayo, se retirará el total del agua liviana del sistema, se procederá a su secado, y se cargará con las 600 toneladas de agua pesada que se utilizarán durante la futura operación. De este modo, la central quedará en condiciones de iniciar la puesta en marcha nuclear para posteriormente generar energía eléctrica e integrarse al Sistema Argentino de Interconexión, aportando el equivalente al 4% del consumo eléctrico total del país. Este hito se suma a otros ya cumplidos, como la primera prueba en caliente, la prueba de presión del sistema primario y moderador, y la carga de elementos combustibles en el reactor.
Fuente: Prensa Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios