El Congreso de Colombia eligió al exdirector de la Policía Nacional y negociador en el diálogo de paz con las FARC, Óscar Naranjo, como nuevo vicepresidente de la República.
Naranjo, de 60 años y quien tendrá la misión constitucional de remplazar al presidente Juan Manuel Santos en ausencias temporales o absolutas, buscará desde su cargo mejorar la seguridad en las ciudades azotadas por frecuentes robos y asaltos de bandas de delincuentes.
El nuevo vicepresidente dijo que, después de cuarenta años de servicio público, sólo aspira a que “los colombianos dejen atrás la violencia, proscriban la muerte y aseguren un futuro en paz”.
Santos, cuyo segundo mandato de cuatro años termina en 2018 y quien está impedido para una segunda reelección, postuló a Naranjo ante el Congreso, que lo eligió como candidato único con 168 votos.
Naranjo formó parte del equipo del Gobierno que negoció durante cuatro años un acuerdo de paz con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en La Habana. El acuerdo, alcanzado a finales del año pasado, busca acabar un conflicto armado de 52 años que ha dejado 220.000 muertos y millones de desplazados.
El nuevo vicepresidente anunció que desde su cargo ayudará a implementar el acuerdo de paz, a erradicar los cultivos de hoja de coca y a promover el respeto por los derechos humanos.
Naranjo fue director de la Policía Nacional y se destacó por su liderazgo en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, también fue director de la policía cuando Santos fue ministro de Defensa en el gobierno del ex presidente Álvaro Uribe.