El régimen de Kim Jong-un avanza con un ambicioso plan militar que busca convertir a Corea del Norte en una potencia bélica capaz de amenazar por tierra, mar y aire, despertando preocupación en la comunidad internacional.
El régimen norcoreano inaugura un resort de lujo en la frontera con Rusia, accesible únicamente para visitantes rusos, marcando un giro en su estrategia turística y económica.
Los gobiernos de Seúl y Pyongyang anunciaron que planean sostener conversaciones por primera vez desde febrero del 2011, en un intento por restablecer un canal de diálogo.
Corea del Norte disparó dos nuevos misiles de corto alcance, lo que lleva a seis la cantidad de lanzamientos que ha realizado en tres días, y condenó a Corea del Sur por criticar lo que calificó de maniobras militares legítimas.
Irma Argüello, presidenta de la Fundación NPS Global y miembro del Fissile Materials Working Group, analizó el panorama global en materia de no proliferación nuclear.