Lo dijo el interventor de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT), Atanacio Pérez Osuna. Aseguró que la mina cuenta con una reserva proyectada de 450 millones de toneladas de carbón, que garantizaría por 150 años los requerimientos de la Central Termoeléctrica.
“La actividad minera pasa por diversas etapas debidamente planificadas. Actualmente el yacimiento se encuentra en una etapa de expansión de su capacidad productiva, por lo tanto está mirando al largo plazo”, dijo el funcionario. Esas actividades se focalizan, entre otras tareas, en la ampliación de galerías que tienen como función alcanzar los mantos de carbón más profundos.
“En esta fase, el foco no está puesto en la producción sino en el avance en metros de galería. Gracias a las inversiones realizadas en el último tiempo, YCRT, en lo que va del año, avanzó 2,5 veces más respecto del 2012”, dijo Pérez Osuna a través de un comunicado.
En el mismo sentido, recordó que “en el año 2012 se incorporaron seis tuneleras para la apertura de galerías principales y actualmente se están emplazando varios nuevos frentes largos para extracción del carbón”.
El funcionario dijo que “consciente de la responsabilidad de administración de un bien que es del conjunto de la sociedad, Yacimientos Carboníferos Río Turbio desarrolla una política de inversión a largo plazo con el horizonte de explotación puesto en los próximos 30 a 50 años”.
“Este es un período de importantes inversiones de capital intensivo, tanto de equipos para poder operar esta nueva tecnología, como de capacitación de recursos humanos”, agregó Pérez Osuna.
Yacimientos Carboníferos Río Turbio desarrolla la actividad minera para extracción del carbón desde hace más 70 años, es la única mina de carbón subterránea del país y un emblema del crecimiento y el desarrollo de la Patagonia.
La empresa está administrada desde el año 2002 por el Estado Nacional con el objetivo de explotar al máximo las potencialidades de este recurso estratégico, dado que el carbón de Río Turbio es apropiado para generar energía mediante la Central Termoeléctrica, la que luego se distribuirá a todo el país a través del Sistema Interconectado Argentino.
Fuente: Télam