La Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio) confirmó las negociaciones con EE.UU. para la aprobación ambiental para vender biodiesel a ese país y compensar, de esa forma, la caída de sus exportaciones al mercado europeo.
Para obtener los créditos ambientales (RIN) requeridos en Estados Unidos para mezclar el biodiésel con el combustible fósil, Argentina necesita la aprobación de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por su sigla en inglés), un trámite que comenzó en 2012 y podría concluir este año. “Estamos transitando un proceso de aprobación ante la EPA que lleva su tiempo. La verdad es que vamos bien encaminados y nos sentimos muy confiados de lograrla. En pocos meses deberíamos conseguir esa habilitación”, señaló Luis Zubizarreta, presidente de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio), a la agencia Reuters.
Las leyes estadounidenses obligan a las refinerías y a los importadores a mostrar los RIN como prueba de que cumplieron con normas que disponen la mezcla de combustibles renovables -como el etanol y el biodiésel- con la gasolina y el diésel. Si las refinerías o los importadores no consiguen suficientes créditos con las compras de biocombustibles certificados, deben cubrir la diferencia comprando los RIN en un mercado secundario, donde su precio se disparó recientemente.
La industria argentina de biodiesel tiene actualmente una capacidad ociosa que supera el 50 por ciento y sus exportaciones sufrieron una fuerte merma en los últimos meses. Según los últimos datos proporcionados por Carbio, en febrero de 2013 se exportaron 45.000 toneladas -contra 155.742 registradas en febrero de 2012- y en marzo de este mismo año fueron 73.500 toneladas -contra 152.750 de marzo de 2012-.
Mientras tanto, la Argentina presentó el pasado 15 de mayo un reclamo formal ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por las medidas proteccionistas adoptadas por los países de la Unión Europea (UE) que han restringido el acceso de nuestro biodiesel a sus territorios por supuesto dumping. “Las exportaciones de biodiesel argentino son eficientes y altamente competitivas por las condiciones de producción y procesamiento del complejo industrial sojero nacional”, aseguran en Carbio, rechazando de plano las acusaciones de la UE.