En una visita especial a las instalaciones de Invap, DEF dialogó con Luis Genovese, gerente de Área Espacial para conocer los satélites.
“Tenemos una posición de liderazgo a nivel mundial en cuanto a la capacidad que hemos logrado desarrollar en la región”, explicó Luis Genovese, gerente de Área Espacial en Invap. En una visita especial, DEF pudo recorrer los establecimientos en San Carlos de Bariloche y conocer sobre el proceso de investigación y producción de un satélite.
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Genovese mira hacia adelante y piensa en los desafíos, objetivos y deseos. Si bien hay mucho foco en la producción nacional, no se quiere perder el foco en la adaptación, flexibilidad y modelo para el negocio global. En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, Invap se amolda y explora en este espectro lleno de oportunidades.

Argentina y su desarrollo satelital en Invap
-¿Cómo se ve Argentina y puntualmente Invap en el panorama satelital a nivel global?
-Tenemos una trayectoria y capacidades. Claramente queremos empezar a ser jugadores globales. Eso no significa hacer todo, sino hacer lo que te genere el mayor diferencial. Hay que estar dispuesto a asociarse e incorporar un modelo que no sea solo hacer todo y solo de una determinada manera.
El mirar hacia afuera va de la mano de ser más adaptable y flexible. Es importante la tecnología propietaria. También es importante ser flexibles en la formulación del negocio. Invap puede proponer hoy una solución diseñada a medida y ese es nuestro diferencial.
-¿Y a nivel regional?
-Vemos la demanda nacional como algo muy importante, y desde siempre la Agencia Espacial ha propiciado el desarrollo de tecnología nacional, no solo con Invap, sino también con todo el ecosistema. Eso es enormemente importante, el apoyo de poder llevar adelante estas políticas de largo plazo. Satisfacer las necesidades que tiene nuestro país, y eventualmente la región, a través de estos productos, y también complementar con un esquema de exportación. La necesidad de poder sostener un piso a nivel del desarrollo espacial nacional, es importante.

-¿Cómo se traduce esto a nivel internacional?
-Es muy poco probable que un cliente adquiera sistemas similares a estos sin que tenga la contra prueba de que tu propio país haya adquirido algo similar. Hay un riesgo asociado a todo esto, no es que después se sube al espacio y se arreglan las cosas.
También ahí aparece el rol de promotor del desarrollo tecnológico, asumiendo ese riesgo por primera vez.
Entonces, ¿por qué un tercero debería asumir ese riesgo que es dinero frente a otros países o competidores que están en una situación más favorable? Por eso vemos que es enormemente importante poder decir: tenemos el ARSAT-1, el ARSAT-2, el SAOCOM-1A y SAOCOM-1B, vamos a tener el SG-1. Todo eso apalanca de una manera determinante nuestra proyección hacia afuera.
-¿Qué rol juega este modelo de negocios asociado al exterior?
-Si bien es enormemente importante, el apoyo de poder llevar adelante estas políticas de largo plazo, también es necesario buscar oportunidades afuera, es el ciclo más virtuoso que nos pudiéramos imaginar: satisfacer necesidades que tiene nuestro país, y eventualmente la región, a través de estos productos, y también complementar con un esquema de exportación.
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¿Cuáles son los desafíos que se siguen para Invap?
-Estamos buscando conectar cada vez más lo que nosotros llamamos el “segmento de vuelo”, es decir, el satélite propiamente dicho, con el segmento de tierra, que es donde se obtiene la información. Los hallazgos se bajan y luego se trabaja sobre la aplicación de esa data para el usuario.
La mayor parte de este trabajo lo hace la Agencia Espacial, porque es justamente uno de sus propósitos. Cada vez se está revistiendo mayor valor comercial a esa información. Entonces, para nosotros también es importante tenerla presente, buscar formas de desarrollar el uso de la información satelital. Eso es lo que termina de cerrar el círculo y para eso justificamos el uso y la fabricación de un satélite. Hay un ciclo virtuoso ahí nuevamente, que es el que cada vez más queremos explotar.
-¿Cómo podría incorporarse Invap a esa parte del “círculo”?
-En general, la mayor parte del negocio se encuentra en el segmento de aplicaciones y no tanto en la utilidad que te genera producir un satélite. Cuando otras empresas en el mundo hablan de integración vertical completa del servicio, están logrando plasmar toda esta cadena de valor.

Probablemente la utilidad la obtienen a través del satélite y su fabricación y quien habilita la posibilidad de obtener esa utilidad está aquí, en Invap. Si fraccionamos toda la información, estamos perdiendo la posibilidad de integrar la cadena de valor. Entonces, para nosotros, y en realidad para toda la actividad espacial en este país, cuanto más conectemos eso, más razón de ser va a tener la inversión satelital respecto de la utilidad que genera esa información.




