¿Cuáles son los logros más importantes de la Argentina en materia de equidad de género y cuáles son los desafíos pendientes? Dialogamos con tres referentes de distintos programas de Naciones Unidas en nuestro país. Por Patricia Fernández Mainardi
La campaña “Únete”, lanzada por la ONU en 2008, busca poner fin a la violencia contra las mujeres. Mediante la campaña se invita a participar y difundir las distintas iniciativas, con cinco objetivos: hacer valer las leyes nacionales , adoptar planes de acción, fortalecer la recopilación de datos, aumentar la conciencia pública y la movilización social, y tratar la violencia sexual durante conflictos. En ese marco, ONU Argentina generó alianzas con distintos organismos nacionales para crear la red de “Hombres por la Igualdad”, proyectó la película “Refugiado”, y lanzó la campaña #Qué Onda en las redes sociales. La campaña busca poner fin a uno de los derechos humanos más vulnerados en el mundo, a continuación la visión de las representantes de diferentes agencias de la Organización.
Conversamos con tres referentes de organismos de la ONU en nuestro país sobre los avances y cuentas pendientes en esta materia.
Jessica Braver, coordinadora de la oficina de la ONU en Argentina:
“A nivel país tenemos un grupo interagencial de género que esta representado por puntos focales de cada agencia, fondo o grupo. Nuestro parámetro normativo son las resoluciones de la Asamblea y nuestro rol en países como Argentina, de renta media alta, es contribuir a aquellas prioridades que el propio Estado determina que va a llevar adelante. Además se busca fortalecer las capacidades internas del sistema e intercambiar información entre las agencias. A nivel global todas las agencias tienen un mandato muy fuerte de promover la igualdad de género. A nivel país creo que es difícil hablar de una única realidad. No es lo mismo ser mujer joven en la Ciudad de Buenos Aires que ser mujer joven en el Impenetrable chaqueño”
Mariana Isasi, consultora en movilización de recursos y comunicación del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA):
“Los estudios de mortalidad materna muestran que el aborto en condiciones inseguras es una de las causas de muerte más importantes. En ese sentido, el Ministerio de Salud estableció un protocolo para los casos de abortos no punibles, con el objetivo de garantizar el derecho y evitar que la mujer quede desamparada ante los objetores de conciencia. En materia de aborto, es necesario aclarar que UNFPA acompaña lo que ocurre en el país, pero no impulsa una cuestión que no se esté discutiendo”.
Andrea Balzano, coordinadora del área género del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Argentina:
“El gran avance que ha mostrado nuestro país tiene que ver con la construcción de un marco normativo. El mayor desafío tiene que ver con la implementación, que todas las mujeres en toda su diversidad, puedan acceder efectivamente a sus derechos en todo el país. Eso tiene que ver con cómo llega la política publica, con la complejidad que tiene un país federal. En términos de acceso de derechos me resulta difícil decir en cuál estamos peor. Porque hay algunos que se pueden medir y otros que no. En los países donde existen encuestas y registros se pude ver el impacto de la política pública. Hay una evidente desigualdad que tiene que ver con los estereotipos. Y no todas las mujeres y hombres son como dicen. Además, las tareas que asumen no son remuneradas de igual manera. En cuanto a representación en ámbitos institucionales, Argentina empezó diez años antes que muchos otros países de la región con la Ley de Cupo, eso hizo que hubiera un salto en la participación. En cuanto a datos, no podemos medir la prevalencia pero nos manejamos considerando la tendencia mundial. Según la OMS, una de cada tres mujeres en el mundo ha vivido o va a vivir violencia física o sexual”.