El mundo árabe exigió el desarme de Hamas, el grupo terrorista que mantiene el control sobre la Franja de Gaza y agrava la crisis humanitaria de millones de palestinos. La Liga Árabe actuó en el marco de nuevas presiones internacionales para reconocer el Estado de Palestina.
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La Liga Árabe cambió su enfoque sobre la Franja de Gaza
Los países de la Liga Árabe sorprendieron con una declaración contra Hamas y su ocupación en la Franja de Gaza, que también fue firmada por los 27 estados de la Unión Europea y otros 17 países.
“En el contexto del fin de la guerra en Gaza, Hamas debe poner fin a su dominio en Gaza y entregar las armas a la Autoridad Palestina, con la participación y el apoyo internacionales, de acuerdo con los objetivos de un Estado palestino soberano e independiente”, decía la declaración.

La Liga Árabe, antaño posicionada en contra de Israel, condenó los ataques de Hamas del 7 de octubre de 2023, que desencadenaron la prolongada guerra en Gaza.
La declaración se produjo en una conferencia de las Naciones Unidas en Nueva York que abordó la posibilidad de la solución de los dos Estados (Israel y Palestina) para poner fin al histórico conflicto.
Además, la nueva postura árabe sobre la situación en la Franja de Gaza se produce en el marco de la decisión de países como Alemania, Canadá, Portugal y Reino Unido de reconocer al Estado de Palestina.
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¿Es posible la solución de los dos Estados?
En un principio, la intención de la comunidad internacional es detener el conflicto en la Franja de Gaza y atender la crisis humanitaria producto de la guerra y el inflexible control territorial de Hamas. El enclave palestino se encuentra desconectado de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) desde que Hamas tomó el poder en 2006 y no realizó nuevas elecciones libres.

El gobierno palestino, sin poder recuperar el dominio sobre el territorio, permitió el florecimiento sin restricciones ni oposición del terrorismo encarnado no solo en Hamas. Esta inacción permitió también las actividades de la Yihad Islámica y la red regional financiada por Hezbollah e Irán.
Desde el atentado terrorista del 7 de octubre de 2023 y la intervención militar de Israel, la injerencia de la ANP en la compleja situación en Medio Oriente se limitó a repudios y declaraciones ante organismos internacionales.
La idea de un Estado palestino, apoyada históricamente por la Liga Árabe y repentinamente por países como Alemania y Reino Unido, es imposible si Hamas mantiene un poder político en la Franja de Gaza y entre los palestinos. Aún más si los líderes de la Autoridad Nacional Palestina no se renuevan y mantienen una postura anti-Israel.
De facilitar la unificación territorial y política, la solución de los dos Estados podría otorgarle al terrorismo las facilidades que otorga el poder estatal para desatar un renovado conflicto contra Tel Aviv y sus aliados en la región.