Taiwán inició los Han Kuang 41, su ejercicio militar anual en medio de las tensiones con China. El despliegue, que simulará guerra híbrida y bloques navales, apunta a ser récord en los 41 años de su realización y se extenderá hasta el 18 de julio.
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Así es Han Kuang, el ejercicio anual de Taiwán
La isla de Taipéi movilizará al mayor número de soldados y recursos militares que se hayan asignado a este ejercicio anual. Se estima que el país desplegará más de 22.000 reservistas durante 10 días y nueve noches, y aprovechará la totalidad de las jornadas para simular distintos escenarios.
Taiwán practicará guerra híbrida, desde campañas de desinformación y ciberataques hasta bloqueos navales, y ofensivas convencionales con foco en los últimos ejercicios de China en el mes de abril. El ministro de Defensa, Wellington Koo, explicó que uno de los objetivos es medir la capacidad de respuesta de una brigada al momento de ser movilizada.
Para los Han Kuang 41, se incorporarán por primera vez lanzacohetes HIMARS, producto de la alianza militar con Estados Unidos, y misiles antiaéreos de fabricación propia. Desde el gobierno remarcaron que buscan obtener avances en la coordinación del ámbito militar, civil y de infraestructura crítica, en un contexto de amenaza latente por parte de la China continental.
Por otro lado, los simulacros incluirán alarmas aéreas, evacuaciones masivas y la protección de infraestructuras esenciales, como plantas de energía y centros logísticos, medidas que se dan en el marco de respuestas a una invasión.
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Los objetivos militares frente a la amenaza de China
El Ministerio de Defensa de Taiwán precisó cinco fases y objetivos entre los que se hallan: la transición de tiempos de paz a la guerra, operaciones anti-desembarcos, combate costero y litoral, la defensa profunda de la isla y guerra prolongada.
El simulacro anual focaliza la necesidad de fortalecer la defensa frente a distintos escenarios, según los éxitos y fracasos que pueda tener en un potencial conflicto militar. Este año se plantea la importancia de la coordinación de los tres integrantes de las Fuerza Armadas taiwanesas -el Ejército Popular de Liberación (EPL), la Armada y la Fuerza Aérea- para repeler una invasión a la isla principal.

Cabe destacar que las fases dos y tres ponen el foco en el ámbito de acción aéreo y marítimo para repeler desembarcos y las complejidades de un enfrentamiento en las costas y en el litoral. Las autoridades mencionan, junto al uso de información de inteligencia, reconocimiento y vigilancia como factores clave para que la Armada y la Fuerza Aérea neutralicen efectivamente a los activos críticos del enemigo.
Un aspecto que no parece abordado es el uso de los drones, una tecnología que ganó trascendencia en la guerra en Ucrania y en los distintos escenarios que enfrenta Israel en Medio Oriente.
Desde el rápido alistamiento para la acción hasta la complejidad de una guerra duradera, Taiwán se alista con el ejercicio Han Kuang 41 y una movilización récord de reservistas que reconoce la amenaza de la creciente presencia militar de Xi Jinping.