El exsecretario de Defensa y exvicepresidente de los Estados Unidos, Dick Cheney, falleció a los 84 años. Se trata de uno de los políticos más prominentes de la historia reciente del país y clave en las políticas de Defensa, desde su rol en la Guerra del Golfo hasta su injerencia directa en la guerra contra el terrorismo tras el atentado a las Torres Gemelas, 11 de septiembre de 2001.
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Richard Nixon y Gerald Ford, las puertas de entrada de Dick Cheney
Su carrera en la gestión pública comenzó en 1969, en simultáneo a la llegada de Richard Nixon al poder. Durante su mandato ejerció distintos cargos como en el Consejo del Costo de Vida (Cost of Living Council), la Oficina de Oportunidades Económicas (Office of Economic Opportunity), y funciones dentro de la Casa Blanca.
Con la victoria de Gerard Ford, segundo vicepresidente de Nixon, Dick Cheney formó parte de los equipos de transición y luego como Auxiliar Adjunto al presidente, y asistente del Jefe de Gabinete, Donald Rumsfeld.
Su figura comenzó a resonar fuerte en el nuevo gobierno republicano y en 1975 asumió como auxiliar del presidente y jefe de Gabinete de la Casa Blanca, cargo que ocupó hasta 1977. La derrota electoral de Ford en las presidenciales de 1976 concretó su salida de la Casa Blanca y su primera experiencia en la Cámara de Representantes como el único congresista por el estado de Wyoming.

Allí fue clave para las políticas de Defensa de otro presidente republicano, Ronald Reagan, para quien votó a favor las leyes de desarrollo para la multimillonaria Iniciativa de Defensa Estratégica (SDI), más conocida como «Guerra de las Galaxias», la ayuda militar a la Contra de Nicaragua y a los insurgentes de Afganistán y Angola.
Su injerencia en las políticas exteriores de Estados Unidos lo llevó a regresar a la Casa Blanca y servir como Secretario de Defensa bajo el gobierno de George H.W. Bush, entre 1989-1993, un puesto bajo la mira debido a que no había servido en la guerra de Vietnam.
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Un hombre clave para la Defensa de Estados Unidos
Desde ese momento, Dick Cheney comenzó a tener un papel fundamental en las decisiones de política exterior. En abril de 1989, rechazó la petición de Alemania Occidental de abrir negociaciones con la URSS para reducir armas nucleares de corto alcance en Europa, una decisión que impidió aumentar la superioridad militar soviética.
Entre 1990 y 1991, forjó la red de alianzas que permitió a Estados Unidos atacar Irak durante la Guerra del Golfo. Convenció al rey Fahd de Arabia Saudita para que permitiera la instalación de bases militares estadounidenses en Dharan, y en 1992 firmó un acuerdo de seguridad con el emirato de Qatar, donde se instaló el comando central de las tropas estadounidenses en la región del golfo Pérsico. Por su liderazgo en el conflicto, el presidente Bush le otorgó a Cheney la Medalla Presidencial de Libertad el 3 de julio de 1991 por su liderazgo.
Con la salida de George H.W. Bush del poder, pasó un tiempo fuera de la toma de decisiones hasta que George W. Bush rompió con dos mandatos consecutivos de Bill Clinton. Con Bush presidente y Cheney como vicepresidente, EE. UU. enfrentó el atentado a las Torres Gemelas y declaró la guerra contra el terrorismo, organizando campañas militares en Medio Oriente contra la organización terrorista Al Qaeda y sus aliados.

Dick Cheney fue uno de los vicepresidentes que más ejerció el poder en la historia de los Estados Unidos, con una injerencia clave en las decisiones presidenciales y relación directa con el círculo íntimo de George W. Bush y el resto del gabinete. Además, robusteció la imagen del país frente a la cuestionada Guerra de Irak y otras decisiones en el plano internacional.
Su manera de ejercer la vicepresidencia sin discutir la figura presidencial fue un hito en la forma de hacer política en la primera potencia militar del mundo, que finalmente se tradujo en las medidas más influyentes del comienzo del siglo XXI. Tan importante fue que reeligió como vicepresidente y continuó dirigiendo la lucha contra el terrorismo global, que más tarde desencadenó le permitió al gobierno de Barack Obama anunciar la muerte de Osama bin Laden, líder de Al Qaeda, el 2 de mayo de 2011.
El fin de la presidencia de Bush también decretó el último paso de Dick Cheney por la Casa Blanca, habiendo cumplido a lo largo de 40 años roles estratégicos para distintos gobiernos republicanos como jefe de Gabinete de Gerald Ford, Secretario de Defensa para George Bush padre y luego como vicepresidente durante los mandatos de George Bush hijo.



