La creaciรณn de la Policรญa Metropolitana y la reciente puesta en marcha de las Policรญas Locales bonaerensesย abren un nuevo panorama en materia de seguridad pรบblica en nuestro paรญs. La descentralizaciรณn y una mayor proximidad con el vecino son enunciados como objetivos centrales de estas reformas. ยฟSerรก suficiente para atender una de las demandas mรกs acuciantes de la ciudadanรญa?
Los reclamos vinculados con la inseguridad constituyen una de las demandas mรกs recurrentes de los ciudadanos en nuestro paรญs. Asรญ lo reflejan estudios cualitativos como el informe anual Latinobarรณmetro, que en su relevamiento de 2013 reflejaba que para el 35 por ciento de los argentinos el problema de la delincuencia era el mรกs importante. Por su parte, la รบltima encuesta de victimizaciรณn del Laboratorio de Investigaciones sobre Crimen, Instituciones y Polรญticas (LICIP) de la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT), publicada en marzoย pasado, arroja que el 39 por ciento de los hogares en 40 centros urbanos de nuestro territorio fue vรญctima de al menos un delito en los รบltimos 12 meses. Desagregados, los datos del LICIP indican que en ese perรญodo 13 de cada 100 hogares sufrieron al meno un delito contra la propiedad sin uso de la violencia y que 31ย de cada 100 hogares sufrieron al menos un delito contra las personas. En cuanto a la participaciรณn relativa de los principales delitos, el 61 por ciento correspondiรณ a robos con violencia.
La participaciรณn comunitaria y los gobiernos locales
El nuevo paradigma en materia de seguridad apunta a un mayor โรฉnfasis en la actividad policial de tipo preventiva enfocada en un รกrea geogrรกfica muy reducida, el vecindarioโ, seรฑala el jurista Hugo Frรผhling, director del Centro de Estudios de Seguridad Ciudadana (CESC) de la Universidad de Chile. Otros elementos tรญpicos del nuevo sistema son โel establecimiento de relaciones estrechas con la comunidadโ, โlas acciones preventivasโ y โel estudio de las condiciones y circunstancias que favorecen la delincuencia o las infracciones menores que trastornan la vida de las personasโ. Este acadรฉmico sugiere el establecimiento de una โasociaciรณn adecuada con gobiernos locales debidamente autorizados para actuar en determinadas รกreas de la seguridad pรบblica y con asociaciones ciudadanas que en el proceso de interacciรณn con la policรญa adquieren la autoridad para discutir, colaborar y evaluar los cursos de acciรณn que se ponen en prรกcticaโ.
Una advertencia al respecto es la que formula el politรณlogo Alberto Fรถhrig, profesor de la Universidad de San Andrรฉs, quien se muestra escรฉptico respecto de la creaciรณn de las denominadas โpolicรญas municipalesโ. Lo considera un โerror estratรฉgicoโ, pues implica dotar a grupos delictivos en formaciรณn โque todavรญa tienen un capital pequeรฑoโ de โuna escala a su medida para corromper a esas fuerzas de seguridad y, acaso tambiรฉn, a los intendentesโ. Cita, en apoyo de su tesis, el caso mexicano, paรญs que contaba con unas 5300 policรญas y ha decidido recientemente emprender el camino inverso de โcentralizar nuevamente a las fuerzas de seguridadโ y de conformaciรณn de una Gendarmerรญa nacional. Haciendo foco en el creciente problema del narcotrรกfico y refiriรฉndose al caso particular del Conurbano bonaerense, en una columna publicada en julio del aรฑo pasado en el portal Infobae, Fรถhrig sostenรญa que, por mรกs buena intenciรณn que tengan, los intendentes no cuentan con โninguna capacidad real, con la policรญa municipal, para hacer frente a este tipo de iniciativasโ.
Mรกs cauto es Federico Scarabino, exsenador provincial bonaerense y actual director ejecutivo de DEMOS, quien reconoce que la experiencia mexicana โno es alentadoraโ. โLa atomizaciรณn de las fuerzas policiales redundรณ en el agravamiento de la corrupciรณn y un mayor descontrolโ, admite, aunque atribuye el fracaso a los criterios de selecciรณn inadecuados, los bajos salarios, la falta de equipamiento y de capacitaciรณn. Scarabino considera que โla cooperaciรณn entre las policรญas de seguridad provincial, municipales y las fuerzas de seguridad federales en territorio provincial, requiere de un nivel de coordinaciรณn muy eficiente a cargo del Poder Ejecutivo provincialโ.
De la reforma Arslaniรกn a las Policรญas locales bonaerenses
En este nuevo enfoque de descentralizaciรณn y cercanรญa con el ciudadano, se inscribe un conjunto de reformas realizadas en nuestro paรญs en los รบltimos 15 aรฑos. El puntapiรฉ inicial lo dio la provincia de Buenos Aires, durante la gestiรณn de Leรณn Arslaniรกn como ministro de Seguridad, primero convocado por el gobernador Eduardo Duhalde, en 1998-1999, y luego durante su segunda gestiรณn, esta vez como funcionario del gabinete de Felipe Solรก (2004-2007). La Ley 12154, sancionada en 1998, reconocรญa a los bonaerenses el derecho a โparticipar en la elaboraciรณn, implementaciรณn y control de las polรญticas de seguridad pรบblicaโ. Con ese fin fueron creados los Foros Vecinales y Municipales de Seguridad.
Posteriormente, en 2004, la Legislatura bonaerense sancionรณ la Ley 13210 de creaciรณn de las Policรญas Comunales de Seguridad, cuya actuaciรณn se limitรณ a los municipios del interior provincial con una poblaciรณn que no excediera los 70.000 habitantes y que dependerรญan funcionalmente de cada intendente. Mรกs tarde, en 2006, se dictรณ la Ley 13482 de unificaciรณn de las normas de organizaciรณn de las Policรญas de la provincia de Buenos Aires, que quedaron bajo la conducciรณn orgรกnica del Ministerio de Seguridad, aunque se incorporรณ a los intendentes al Consejo Provincial de Seguridad Pรบblica. Esta รบltima norma contemplaba, asimismo, las situaciones especiales de aquellos municipios del interior que excedieran los 70.000 habitantes y solicitasen ser incluidos en el rรฉgimen de Policรญas Comunales.
Finalmente, en junio del aรฑo pasado y luego de un frustrado debate en la Legislatura, el gobernador Daniel Scioli emitiรณ el Decreto 373/14, por el cual se creรณ la Superintendencia de Seguridad Local dependiente del Ministerio de Seguridad provincial. Acto seguido, el ministro Alejandro Granados dictรณ la Resoluciรณn 835 de creaciรณn de las Unidades de Policรญa de Prevenciรณn Local en aquellos Municipios de mรกs de 70.000 habitantes que adhirieran mediante un convenio especรญfico suscripto por el intendente municipal y ratificado por su respectivo Concejo Deliberante. Se estableciรณ que estas nuevas fuerzas locales โtendrรกn como misiรณn esencial la prevenciรณn de delitos y contravenciones, actuando con caracterรญsticas de policรญa de proximidad, coordinando su actuaciรณn con los municipios y demรกs unidades policialesโ. Sus efectivos deberรกn aprobar un curso de formaciรณn de doce meses de duraciรณn, perรญodo que podrรก reducirse a un plazo no menor a seis meses โbajo circunstancias especialesโ. Para ello se creรณ el Instituto de Formaciรณn y Capacitaciรณn de las Unidades de Policรญa de Prevenciรณn Local, en el รกmbito de la Subsecretarรญa de Planificaciรณn del Ministerio de Seguridad bonaerense. Cada unidad policial local deberรก contar, ademรกs, con un coordinador operativo designado por dicho Ministerio a propuesta del intendente municipal.
La Policรญa Metropolitana y un nuevo gobierno de la seguridad porteรฑa
El proceso que dio nacimiento a la Policรญa Metropolitana fue producto de un acuerdo entre las principales fuerzas polรญticas en el Congreso Nacional, ya que para su creaciรณn fue necesario modificar la denominada โLey Cafieroโ, de 1995, que establecรญa los lรญmites de la autonomรญa porteรฑa. En su redacciรณn original, el artรญculo 7 mantenรญa en cabeza del gobierno nacional la โcompetencia en materia de seguridad y protecciรณn de las personas y de los bienesโ en el territorio de la ciudad. Con la sanciรณn de la Ley 26288, en agosto de 2007, se transfirieron al gobierno porteรฑo โlas funciones y facultades de seguridad en todas las materias no federalesโ, al tiempo que se integraba a la Ciudad de Buenos Aires al Consejo de Seguridad Interior.
En 2008, la Legislatura convirtiรณ en ley un proyecto del jefe de Gobierno, Mauricio Macri, por el cual se constituyรณ la Policรญa Metropolitana, con โfunciones de seguridad general, prevenciรณn, protecciรณn y resguardo de personas y bienes, y de auxiliar de la Justiciaโ. Con la misiรณn de capacitar y formar profesionalmente al personal policial y a los funcionarios responsables de la implementaciรณn de polรญticas en esta materia, se creรณ el Instituto Superior de Seguridad Pรบblica (ISSP). Un aspecto novedoso de la nueva fuerza porteรฑa es la โigualdad de gรฉneroโ prevista para la integraciรณn de su personal, que โsegรบn establece la Ley de Seguridad Pรบblica porteรฑaโ guardarรก โuna estricta representaciรณn de ambos gรฉneros, ya sea para el acceso efectivo a cargos de conducciรณn, como asรญ tambiรฉn en todos los niveles y รกreasโ; asรญ como โla paridad entre el trabajo realizado y la remuneraciรณn recibidaโ.
La Policรญa Metropolitana cuenta actualmente con unos 4930 efectivos y 570 auxiliares, que โsegรบn adelantรณ a DEF el ministro de Seguridad porteรฑo, Guillermo Montenegroโ se convertirรกn en 6100 para fines de este aรฑo. Se encuentra desplegada en tres comunas: la 4 (Nueva Pompeya, Parque Patricios, La Boca y Barracas), la 12 (Coghlan, Saavedra, Villa Urquiza y Villa Pueyrredรณn) y la 15 (Agronomรญa, Chacarita, La Paternal, Parque Chas, Villa Ortรบzar y Villa Crespo). Posee, ademรกs, un destacamento en el Microcentro y otro en Constituciรณn, destinados a realizar servicios de vigilancia preventiva en esas zonas.
Las perspectivas de un modelo innovador
En los fundamentos de su proyecto de ley de Policรญas Municipales, el dirigente Marcelo Sain, investigador de la Universidad Nacional de Quilmes, seรฑalaba que โlos municipios son grandes receptores de las demandas sociales inmediatas a favor de un mayor activismo local en la gestiรณn de los asuntos de seguridad pรบblicaโ, pero โno cuentan con los mecanismos normativos e institucionales adecuados ni con los recursos humanos capacitados para tal emprendimientoโ. Destacaba, en ese marco, โla necesidad de llevar a cabo un proceso de apropiaciรณn de facultades โen el sentido de asunciรณn de responsabilidadesโ y de generaciรณn de capacidades de gestiรณn en materia y de direcciรณn de los diferentes actores e instancias que intervienen en la situaciรณn de la seguridad pรบblica localโ.
Al mismo tiempo, advertรญa que โla vigorizaciรณn del gobierno localโ en esta delicada materia debรญa ir necesariamente acompaรฑada por โel fortalecimiento de la participaciรณn de la comunidad en la gestiรณn y control de la seguridad pรบblica localโ, para lo cual instaba al โapuntalamiento y consolidaciรณn de los foros de participaciรณn comunitariaโ y a โla intervenciรณn de los actores sociales y comunitarios โasociaciones, organizaciones no gubernamentales, entidades de la sociedad civil y agrupamientos vecinalesโ en la gestiรณn de asuntos de la seguridad pรบblicaโ. Entre las ventajas del modelo de โdescentralizaciรณn policialโ, destacaba la โmayor proximidad, capacidad de respuesta, conocimiento del territorio y control sobre las problemรกticas criminales en el plano localโ, mejorando de esa forma โlas labores de vigilancia y prevenciรณn, en contraste con las grandes estructuras policiales centralizadas que destinan un mayor nรบmero de personal a tareas administrativas y burocrรกticas en detrimento del trabajo policial operativoโ.




