“Estamos acompañando a los hombres y mujeres de la Fuerza Aérea que, en este momento, están haciendo lo que el mandato presidencial y la Nación demandan: entrenar para tener Fuerzas Armadas aptas para que, cuando sean convocadas, puedan llevar adelante lo que deben hacer con el mayor beneficio y el menor error posible”, dijo a DEF, desde la localidad neuquina de Loncopué, Juan Battaleme, el secretario de Asuntos Internacionales del ministerio de Defensa de Luis Petri.
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¿El escenario del encuentro? El ejercicio “Glaciar”, la actividad que, año tras año, la Fuerza Aérea Argentina (FAA) realiza para adiestrar a las tripulaciones de las aeronaves militares que se desplegarán en la Antártida para mantener el puente aéreo entre ambos continentes, colaborar con los científicos y asegurar el apoyo logístico necesario para mantener operativas a las bases antárticas.

Fuerzas Armadas: mayor adiestramiento, mejores militares
-¿Qué podés decir de la relevancia de ese tipo de ejercicios y de tantos otros que se llevan adelante con países como Estados Unidos?
-Varias cosas. Primero que no soy solo yo. En mi caso, soy responsable de establecer la dinámica con el resto de los Estados. Es decir, dentro de lo que es la Secretaría de Asuntos Estratégicos y Militares, se trabaja mucho para que podamos entrenar en toda la geografía de nuestro país. Justamente, por la extensión y por las demandas que existen -no solo domésticas, sino también para poder operar en otros lados y con otras Fuerzas Armadas- es que el ministro Luis Petri puso énfasis y recursos a todo este tipo de entrenamientos. Por eso, el despliegue que vemos en el “Glaciar” con helicópteros, un Hércules C-130 y una aeronave de evacuación sanitaria, entre otros medios.
Se le está dando importancia a estas actividades de adiestramiento porque son las que hacen fuertes a las FF. AA.
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-¿En qué sentido?
-Las hace fuerte porque, salir de sus unidades y operar en todo tipo de geografías, es un entrenamiento constante. Creo que ese elemento es clave para tener las Fuerzas Armadas aptas y de clase mundial que queremos lograr.

Oceánico, Malvinas e Islas del Atlántico Sur y la Antártida: posibles escenarios de la Política de Defensa Nacional
–En este caso, el adiestramiento pone el foco en asegurar la presencia en la Antártida y, en definitiva, en el Atlántico Sur, ¿es importante para el Ministerio?
-Justamente, estamos entrenando en invierno y simulando las condiciones reales a las que los efectivos se enfrentan en la Antártida.
La República Argentina tiene una presencia sostenida y una conectividad muy grande entre el continente y la Antártida. A propósito, esta se garantiza a través de la conjuntez, con el trabajo del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea.
Lo que hacemos es lo que se denomina autonomía operacional. En este caso, por ejemplo, poder hacer las extracciones, como evacuaciones, con nuestros propios medios. Además, parte de la Directiva de Política de Defensa Nacional -que estamos por lanzar- establece tres escenarios interrelacionados.
-¿Cuáles son los entornos de la Directiva de Política de Defensa Nacional?
-El oceánico, Malvinas e Islas del Atlántico Sur, y la Antártida. Este último es donde nosotros necesitamos entrenar distintos tipos de capacidades para responder a los desafíos completamente distintos que enfrenta Argentina. Esa es la razón por la que estamos aquí. Por eso se harán ejercicios de forma continuada. Ese es el motivo por el que estamos tratando de incorporar nuevos y mejores elementos para entrenar y , cuando la patria nos convoque, estar presentes y responder al llamado de las necesidades de la República Argentina.




