Científicos del CONICET, a bordo del buque Falkor II, transmitieron en vivo imágenes inéditas del lecho marino del Atlántico Sur a más de 3000 metros de profundidad.
Lo que parecía una misión científica de rutina terminó convirtiéndose en un fenómeno viral, con más de 80 mil espectadores: criaturas con formas extrañas, colores brillantes y comportamientos misteriosos cautivaron a miles de espectadores en tiempo real.
Te puede interesar: Expedición del CONICET: ¿a quién le corresponde la soberanía del lecho marino?
El proyecto “Talud Continental IV” contó con un vehículo operado remotamente (ROV) que circuló en el Cañón Submarino de Mar del Plata, a 300 kilómetros de la costa.












Las especies que se vieron en el stream del CONICET
Estrella de mar
Entre las especies más virales del streaming del CONICET se destacó la popular “estrella culona”, como fue apodada en redes sociales. Aunque aún no se definió con precisión su especie debido a su forma inusual, se trata de una estrella de mar abisal cuya aparición se convirtió en uno de los emblemas de la transmisión.
Pepino de mar
Otra de las grandes protagonistas fue la “Batatita”, un pepino de mar del género Benthodytes, clase Holothuroidea. Su color rojizo-violáceo intenso y su cuerpo ovalado llamaron la atención de miles de personas. Fue filmado en los fondos fangosos del océano a unos 2.500 metros de profundidad.
Crustáceos
Los crustáceos también fueron clave en la expedición. Se pudo observar un cangrejo litódido de caparazón rojizo y espinoso, adornado con percebes, pequeños mariscos que se incrustan en superficies rocosas, y también grandes langostas ocultas en madrigueras sedimentarias.
Más cerca de la superficie, se registraron crustáceos bentónicos de textura rugosa y apariencia puntiaguda, que cumplen funciones de carroñeros en los ecosistemas más oscuros del océano.
Raya de aguas profundas
En otro momento del recorrido, a poco más de 1000 metros de profundidad, apareció una raya bentónica, camuflada en el fondo. Estas especies suelen tener un perfil bajo y pasar desapercibidas en las profundidades oceánicas.
Medusas coronadas
Las medusas coronadas del género Atolla fueron otras grandes protagonistas. Su cuerpo gelatinoso y sus destellos fosforescentes hipnotizaron a los espectadores. También sorprendieron las esponjas de aguas frías, de color rosado y aspecto compacto, adheridas a rocas en zonas profundas.
Pulpo Dumbo
Uno de los momentos más comentados del streaming fue la aparición de un pulpo Dumbo. Se lo vio desplazándose con movimientos suaves y curiosos, mientras incubaba huevos en cavidades del lecho marino. Según explicaron los científicos a bordo, este tipo de comportamiento reproductivo demanda tanta energía que, en la mayoría de los casos, la hembra muere tras completar el proceso.

Calamares abisales
Otro hallazgo que generó revuelo fue el de varios calamares abisales, encontrados entre los 1300 y 2500 metros de profundidad. Entre ellos se registró un calamar de cristal, reconocido por su cuerpo translúcido y su forma corporal única.
Sifonóforos y corales
También se observaron sifonóforos, colonias gelatinosas de cnidarios hidrozoos que flotaban suavemente en la oscuridad del océano, como si fueran nubes vivas. Además, se encontraron corales blandos de aguas profundas, adheridos al sedimento. Su color rosado vibrante y su estructura ramificada los convirtió en otro de los atractivos visuales de la expedición.
Cómo es el vehículo remoto que utilizaron para la expedición
Para esta expedición utilizaron el ROV SuBastian, que puede alcanzar una profundidad de 4500 metros y una velocidad máxima de 3 nudos. Esta tecnología permitió no solo captar imágenes inéditas, sino la recolección de muestras físicas y recopilación de datos químicos y térmicos del agua.
Además, con sus sensores marinos, tiene la capacidad de realizar cartografía marina y tiene una duración de, aproximadamente, unas 8 horas bajo el agua. Gracias a este vehículo, fueron vistas muchas especies vivas en una resolución de calidad alta.