Con la resolución 538/2025, publicada en el Boletín Oficial, la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN) dio luz verde a la puesta en marcha del Centro Argentino de Protonterapia (CEARP).
El CEARP será el primer centro de medicina nuclear de su tipo en América Latina y brindará la tecnología más avanzada para el tratamiento del cáncer. Será gestionado por una fundación conformada por la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y la Universidad de Buenos Aires (UBA). Solo una veintena de países en el mundo cuentan con un equipamiento similar, y todos ellos se encuentran en el hemisferio norte.
Este centro médico está ubicado en un predio adyacente a la Fundación Centro Diagnóstico Nuclear (FCDN) y frente al Instituto Oncológico “Ángel Roffo”, en el barrio porteño de Agronomía.
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Medicina nuclear: qué es la protonterapia y cuáles son sus beneficios
La protonterapia es una radioterapia que utiliza partículas pesadas —protones— y ofrece una mayor precisión y menor toxicidad que las técnicas convencionales. El protón tiene casi 2000 veces más masa que el electrón, por lo que resulta muy eficiente para destruir las células tumorales.
Al ser una terapia no invasiva, de bajo riesgo, no afecta los tejidos sanos adyacentes al tumor. Es ideal para el tratamiento de patologías complejas, como tumores cerebrales o que afectan la médula espinal y el área de la cabeza y el cuello, así como los tumores pediátricos y los cánceres recurrentes.
La licencia autoriza a la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) a ejecutar las pruebas técnicas de funcionamiento del ciclotrón, la línea de transporte del haz de protones y el Laboratorio de Investigación y Desarrollo en Protonterapia (LAIDEP). En una etapa posterior, se pondrán en funcionamiento las salas clínicas, una vez que la ARN otorgue la licencia de operación.
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El ciclotrón, corazón del Centro Argentino de Protonterapia
El ciclotrón, que es el acelerador de partículas que genera los haces de protones para los tratamientos médicos, fue instalado en junio de 2024. El aparato, equipado con el sistema Proteus Plus, fue provisto por la empresa belga Ion Beam Applications (IBA), pesa 230 toneladas y se ubica en un recinto blindado con paredes de hormigón de hasta cuatro metros de ancho, que cuenta con todas las medidas de seguridad para garantizar la protección de los profesionales y pacientes.
El ciclotrón produce haces de partículas a partir de hidrógeno de máxima pureza. Al someter al átomo de hidrógeno a una fuente de ionización, pierde el electrón y queda el protón, que es acelerado en el ciclotrón con un campo eléctrico alterno hasta llegar a dos tercios de la velocidad de la luz. Después, los protones llegan a un degradador, para reducir la energía hasta el valor requerido.
“Es una instalación de alta complejidad”, destacó, en diálogo con DEF, el vicepresidente de la CNEA, Luis Rovere, quien subrayó que “estamos ante una oportunidad única para la Argentina”. “En este centro, no solo vamos a tratar a nuestros pacientes, sino que también estaremos en condiciones de brindar servicios de tratamientos de radioterapia al exterior”, manifestó, en marzo pasado, el funcionario, quien acompañó a DEF en una recorrida por las instalaciones.
