El paรญs del sol naciente estรก trabajando fuertemente en un nuevo canal diplomรกtico. Despuรฉs de ser una superpotencia econรณmica, hoy Japรณn apuesta a la cultura para mejorar la relaciรณn con otros Estados. Desde las manifestaciones mรกs populares hasta las artes de mayor refinamiento se convirtieron en la cara visible de una naciรณn que ha sabido renovarse y marcar la tendencia a nivel global.
Por Juan Ignacio Cรกnepa
ยฟQuรฉ dirรญan los padres de un chico de diez aรฑos que pasa su tiempo libre navegando en Internet, averiguando datos sobre sus personajes favoritos de las series animadas japonesas? ยฟPรฉrdida de tiempo? ยฟHobby? ยฟCosa de niรฑos? Las respuestas pueden ser de lo mรกs variadas, alentadoras o no, pero difรญcilmente coincidan con lo que el doctor Teiji Hayashi, de la Cancillerรญa japonesa, explicรณ a DEF. El niรฑo estรก haciendo, ni mรกs ni menos, diplomacia.
Desde hace algunos aรฑos, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Japรณn abriรณ un nuevo canal para relacionarse con el resto de los paรญses: la cultura. โHace mucho tiempo que estamos trabajando para obtener la comprensiรณn de los extranjeros hacia Japรณnโ, dijo el director de la Divisiรณn de Planeamiento para la Diplomacia Pรบblica de la Cancillerรญa nipona. De esta manera, Japรณn, que habรญa basado su diplomacia en los aspectos comerciales gracias al poderรญo econรณmico que detentรณ durante fines de los 70 y los 80, se ha convertido en una superpotencia cultural o, tal como dice el periodista Douglas McGray en un artรญculo para la revista Foreign Policy, en el โHegemรณn de Pokรฉmonโ.
PODER BLANDO
Despuรฉs de la Segunda Guerra Mundial, Japรณn tuvo que empezar su historia de cero. Gracias a la doctrina Yoshida (por Shigeru Yoshida, primer ministro de posguerra), el archipiรฉlago nipรณn comenzรณ un camino de crecimiento que lo condujo a transformarse en pocas dรฉcadas en la principal economรญa del mundo. En consecuencia, la diplomacia japonesa tenรญa un fuerte sesgo econรณmico. Sin embargo, a partir de los 70, las crรญticas por parte de ciertos paรญses asiรกticos hacia el carรกcter fuertemente econรณmico de la diplomacia nipona llevaron a los dirigentes polรญticos de Japรณn a darle un enfoque mรกs humano. Asรญ lo dice la especialista Csilla Davalovszky, del Real Instituto Elcano, en el trabajo “La diplomacia pop: una mirada a la diplomacia cultural japonesa”. Allรญ seรฑala que en la ediciรณn de 1973 del informe anual Diplomatic Bluebook, โel Ministerio de Relaciones Exteriores japonรฉs declarรณ que en los tiempos que corrรญan ya no era posible conseguir los intereses econรณmicos y polรญticos del paรญs sin desarrollar un entendimiento mutuo entre Japรณn y los paรญses del mundoโ. Segรบn la autora, se temรญa โun aislamiento a la inversaโ.
Esa tendencia que se iniciรณ en los 70 y que fue ganando protagonismo con la desaceleraciรณn econรณmica japonesa de la dรฉcada del 90, terminรณ de consolidarse hace poco mรกs de seis aรฑos cuando, dentro del Ministerio de Relaciones Exteriores de Japรณn, se estableciรณ el Departamento para la Diplomacia Pรบblica. โEn Asia tenemos una cultura bastante รบnica y diferente de lo que puede ser China o Coreaโ, puntualizรณ Hayashi. โMuchos de los argentinos conocen parte de esa cultura, como la ceremonia del tรฉ, el karate, o lo mรกs moderno como el manga y el animรฉ. Entonces, hace diez aรฑos, volvimos a descubrir que tenรญamos esos bienes para hacerles entender a los extranjeros cรณmo es Japรณn y la vida en nuestro paรญs. Entendimos tambiรฉn que la influencia de esa comprensiรณn o intercambio mutuo con los extranjeros podrรญa ser una fuerza promotora bastante fuerte para la diplomacia japonesaโ, explicรณ el diplomรกtico. Para Csilla Davalovszky, โya no solo se trata de desarrollar un entendimiento mutuo entre gobiernos, sino tambiรฉn de conseguir la simpatรญa de los ciudadanos de otros paรญses, por lo que en Japรณn, acciรณn cultural y diplomacia van de la manoโ.
Esta forma de diplomacia se nutre de los conceptos elaborados por el teรณrico de las relaciones internacionales norteamericano Joseph Nye, quien a principios de los 90 desarrollรณ la idea del soft power, o poder blando, como herramienta de un Estado para afectar el comportamiento de otros actores a travรฉs de medios culturales e ideolรณgicos. โEn la diplomacia tradicional se hace hincapiรฉ en el poder militar, econรณmico y polรญtico, basรกndose en relaciones intergubernamentales, o sea, solo entre gobiernos -dijo Hayashi-. Hoy en dรญa, gracias a la democratizaciรณn de varios paรญses, la opiniรณn pรบblica tiene cada vez mรกs influencia en la diplomacia. Por lo tanto, los ministerios o los diplomรกticos tienen que trabajar para ganar apoyo y entendimiento de la gente para mejorar las condiciones de donde se desarrolla la polรญtica exteriorโ.
CULTURA AMPLIADA
El doctor Teiji Hayashi remarcรณ a DEF que este tipo de diplomacia es facilitado por la globalizaciรณn y el desarrollo tecnolรณgico, en particular en las comunicaciones. โHace veinte aรฑos, para que un argentino leyera un libro o un periรณdico japonรฉs tenรญa que ir a un lugar muy especรญfico, por ejemplo el Centro Cultural de la Embajada, y perder bastante tiempo y dinero para acceder a esa informaciรณn. Hoy en dรญa, a travรฉs de Internet, se puede leer un periรณdico japonรฉs en su lengua madre o en inglรฉs, y de vez en cuando, tambiรฉn en espaรฑolโ.
Para describir aun mรกs el impacto de las nuevas comunicaciones, el diplomรกtico nipรณn dio otro ejemplo: el caso del animรฉ (las series televisivas animadas japonesas) o el manga (cรณmic hecho en Japรณn), dos productos de enorme รฉxito mundial entre los jรณvenes. โMuchos argentinos comienzan a tener un interรฉs en la cultura popular del Japรณn moderno a travรฉs de Internet, porque en Latinoamรฉrica todavรญa no hay tantos libros de manga, o tantas emisiones de animรฉ por las cadenas televisivasโ. En ese sentido, destacรณ que โcada vez mรกs la gente puede interesarse en la cultura y la vida de otros paรญsesโ.
Estos elementos, que pueden considerarse de cultura popular, ya son parte de la alta polรญtica de la Isla. En abril de 2006, el entonces ministro de Relaciones Exteriores de Japรณn, Taro Aso, presentรณ en Tokio la nueva direcciรณn de la diplomacia cultural japonesa. El anuncio se llevรณ a cabo en la Digital Hollywood University, cuna de la vanguardia japonesa en contenido digital. Segรบn Csilla Davalovszky, el mensaje central del ministro Aso puede resumirse en una frase: โuna diplomacia cultural que deja de lado la cultura popular no merece ser llamada una verdadera diplomacia culturalโ. Consciente del enorme interรฉs que despiertan en el mundo el animรฉ, el manga, la mรบsica y la moda, el ministro calificรณ la cultura popular como โun nuevo aliado de la diplomacia japonesaโ y llamรณ a los jรณvenes diseรฑadores a ser los nuevos agentes de la diplomacia cultural nipona.
Teiji Hayashi aclarรณ que esta polรญtica exterior no debe confundirse con โpropaganda del gobiernoโ, sino que debe tomarse como un instrumento enriquecedor de la vida de los pueblos. โSi un japonรฉs sabe de tango o de la obra de Borges, puede tener una vida tal vez mรกs cultural y divertida. No es solamente para la diplomacia sino tambiรฉn para la vida de la genteโ. Ademรกs, segรบn el diplomรกtico japonรฉs, el valor de esta polรญtica es que โse puede traducir en mantenimiento de la paz, cooperaciรณn internacional para cuidar el medio ambiente, o pautas para combatir el cambio climรกticoโ.
EMPRESAS JAPONESAS: MODELO PROBADO |
Uno de los primeros elementos de la cultura japonesa en expandirse por el mundo fue el modelo de gestiรณn de empresas japonesas. Particularmente su fรณrmula de racionalizaciรณn de insumos, conocida como kamba, en japonรฉs. Segรบn Teiji Hayashi, quien conoce de cerca el tema, la fรกbrica de Toyota instalada en Argentina aplica este mรฉtodo de gestiรณn. โPara sacar las partes de los automรณviles se busca un tiempo justo, porque si no, tienen que guardarlas en los almacenes y eso aumenta el coste. El proceso y los pasos son muy precisos. Esto permite un coste inferior y una calidad mรกs altaโ, explicรณ. Ademรกs, Hayashi remarcรณ que Japรณn recibe anualmente numerosos argentinos para entrenarse y aprender este mรฉtodo. Juan Ignacio Cรกnepa |