Luego del éxito de los primeros streamings científicos del CONICET, se impulsó un nuevo proyecto: observar e investigar a los pingüinos de la Patagonia. Con la colaboración de explore.org, los investigadores podrán analizar el comportamiento de las aves como nunca antes y en locaciones de la zona sur del país que no están habitadas.
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CONICET: el nuevo streaming que observa pingüinos
El nuevo streaming del CONICET permite observar en tiempo real la vida de los pingüinos de Magallanes, una de las especies más emblemáticas de la Patagonia. Estos pingüinos, conocidos científicamente como Spheniscus magellanicus, viven en aguas templadas del Atlántico Sur y se distribuyen entre la costa argentina, Chile y las islas Malvinas.
A diferencia de las especies que habitan zonas polares, los Magallanes migran miles de kilómetros y pueden llegar incluso hasta las costas de Brasil. Son aves anfibias que alternan su vida entre tierra y mar: en tierra se reproducen, ponen huevos y crían a sus pichones, mientras que en el océano pasan largas jornadas alimentándose de peces como anchoíta, merluza y sardina fueguina, además de calamares y pulpos.

También son buceadores excepcionales y pueden capturar cientos de presas por viaje, buceando hasta cuarenta horas seguidas en busca de alimento.
El streaming fue instalado en el Parque Provincial Patagonia Azul, en la costa de Chubut, mediante cámaras alimentadas por energía solar que transmiten sin interrupciones desde islas deshabitadas como Tova, Tovita y el islote Gran Robredo.
La investigación que llevarán a cabo con los pingüinos
Estas locaciones están alejadas de cualquier tipo de acceso y por eso la tecnología cumple una función clave: por primera vez, se puede observar la vida íntima de los pingüinos sin interferir en su comportamiento. La transmisión muestra escenas que antes eran casi imposibles de registrar.
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Se puede ver cómo los adultos se turnan para incubar los huevos, cómo alimentan a los pichones después de regresar de largas travesías en el mar, cómo reaccionan ante tormentas repentinas y cómo interactúan con otros miembros de la colonia. La cámara registra también la llegada de depredadores o animales curiosos que se acercan al nido, así como los cambios bruscos de clima típicos de la Patagonia.

El streaming funciona de manera continua, las 24 horas del día, y ya está disponible para el público general. De esta forma, cualquier persona desde cualquier lugar del mundo puede conectarse y observar en vivo escenas que antes solo estaban al alcance de investigadores especializados. Esta ventana constante permite estudiar con un nivel de detalle inédito distintos aspectos de la reproducción y el comportamiento de la especie.
Los científicos pueden analizar, por ejemplo, con qué frecuencia los adultos alimentan a los pichones, cuánto tiempo pasan en el mar buscando presas, en qué momento exacto del año ponen los huevos y cuántos de ellos llegan a eclosionar con éxito.
Toda esa información es valiosa porque los pingüinos funcionan como centinelas ambientales: su éxito reproductivo refleja la salud del ecosistema marino. Si hay menos peces disponibles, si la temperatura del agua cambia o si aparecen contaminantes, los primeros indicios suelen verse en el comportamiento de las aves.




