En Estados Unidos se presentó la supercomputadora “El Capitán”, la tercera de su tipo en el mundo, que puede funcionar a una velocidad inigualable para realizar pruebas y prácticas para el arsenal nuclear de EE.UU. Estiman que alcanzaría un ritmo de velocidad de 2.79 quintillones de cálculos por segundo. Es un desarrollo revolucionario en el ámbito de la computación a exaescala (quintillones por segundo), diseñada para abordar desafíos tecnológicos, científicos y de seguridad nacional de una forma sin precedentes.
- Te puede interesar: Fugaku Next: la computadora preparada para Inteligencia Artificial que revolucionará el mercado tecnológico

Cómo funciona la nueva y revolucionaria supercomputadora
Creada para el Laboratorio Nacional Lawrence Livermore (LLNL) en Estados Unidos, esta máquina no solo marca un hito en el rendimiento computacional con su capacidad de superar los 2 exaflops (quintillones de cálculos por segundo), sino que también establece nuevos estándares en la integración de hardware avanzado, inteligencia artificial y sostenibilidad energética.
La misión de “El Capitán” consiste en proteger la seguridad nacional de los Estados Unidos, particularmente en la evaluación y simulación del rendimiento de armas nucleares sin necesidad de pruebas físicas, cumpliendo con lo dicho a partir de la firma del Tratado de Prohibición Completa de Ensayos Nucleares (CTBT) de 1996. Además, se utilizará en diversas misiones centradas en la ayuda en emergencias, como desastres naturales y otras crisis ocasionadas por humanos.
Asimismo, su potencia de cálculo será aprovechada en investigaciones científicas avanzadas, incluyendo el modelado climático, la bioseguridad, el descubrimiento de fármacos y el modelado de terremotos. La integración de inteligencia artificial y aprendizaje automático en sus operaciones permitirá abordar problemas complejos y promover avances significativos en diversas disciplinas científicas.

Arsenal nuclear: el impacto en el medio ambiente de “El Capitán”
Una de las ideas que se plantearon es también utilizarla para modelar y prever escenarios de emergencias naturales y crisis humanitarias. Esto permitirá que “El Capitán” pueda realizar cálculos rápidos y precisos, así como desarrollar modelos predictivos para actuar frente a desastres naturales como terremotos, tsunamis y huracanes. También puede ayudar a mapear y planificar respuestas ante desastres ocasionados por humanos, como derrames químicos o nucleares.
A su vez, “El Capitán” también integrará de manera nativa capacidades de Inteligencia Artificial y aprendizaje automático, lo que le permitirá abordar problemas de alta complejidad en diversas disciplinas científicas. Esta máquina no solo ejecutará tareas programadas por humanos, sino que también será capaz de “aprender” a partir de los datos que procese.
En el campo de la bioseguridad, por ejemplo, esta supercomputadora podrá identificar patrones de mutación en virus y bacterias, ayudando a prevenir pandemias o diseñar tratamientos más efectivos en tiempo récord. También será útil en la detección de amenazas cibernéticas mediante el análisis masivo de redes y patrones sospechosos.

Otra área en la que tendrá un impacto significativo es en la investigación del cambio climático. Gracias a su enorme capacidad de cálculo, podrá ejecutar simulaciones climáticas más precisas y detalladas que las disponibles actualmente.
Esto permitirá modelar los efectos de diferentes escenarios de emisión de gases de efecto invernadero, prever el aumento del nivel del mar y analizar patrones meteorológicos extremos. Además, su eficiencia energética representa un esfuerzo consciente para reducir el impacto ambiental de la computación de alto rendimiento.
Otras funciones de la supercomputadora en el ámbito científico
Por su parte, en el ámbito de la salud, será una herramienta clave para acelerar el desarrollo de nuevos medicamentos. Utilizando modelos moleculares avanzados y análisis masivos de datos, podrá identificar interacciones entre proteínas y compuestos químicos con una velocidad y precisión sin precedentes.
Esto no solo reducirá significativamente el tiempo necesario para desarrollar tratamientos, sino que también permitirá avances en la medicina personalizada, ajustando tratamientos específicos a las características genéticas de cada individuo.
- Te puede interesar: Industria tecnológica: los desarrollos e iniciativas que marcaron el 2024
“El Capitan” también contribuirá a la exploración del cosmos. Su capacidad para procesar grandes cantidades de datos lo convierte en un aliado indispensable para interpretar información obtenida de telescopios y misiones espaciales.

Esto podrá simular la formación de galaxias, analizar agujeros negros y predecir colisiones de asteroides con una precisión jamás vista, ayudando a la comunidad científica a comprender mejor los orígenes y el futuro del universo.
Además de sus impresionantes capacidades técnicas, la supercomputadora se destaca por su diseño eficiente y sostenible. Utiliza un sistema de refrigeración líquida directa que maximiza el rendimiento mientras minimiza el consumo energético. Este enfoque es fundamental en un momento en que la sostenibilidad es una prioridad global.
Con su diseño basado en la arquitectura HPE Cray EX y los aceleradores AMD Instinct MI300A, “El Capitán” también optimiza la utilización de recursos, lo que permite manejar volúmenes masivos de datos con una eficiencia sin precedentes.




