El Atlas de la Antártida Argentina es una publicación interactiva que aborda el continente blanco desde distintas áreas científicas y ejes temáticos. Acerca de este innovador proyecto, DEF conversó con su coordinadora, la profesora Analía Almirón, del Instituto Geográfico Nacional (IGN).
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La línea de trabajo sobre la Antártida Argentina está enmarcada dentro del Atlas Nacional Interactivo de Argentina (ANIDA), un atlas digital del Instituto Geográfico Nacional (IGN), que comenzó a elaborarse en 2015 y ya se encuentra disponible en la web. Esta novedosa propuesta permite que los usuarios interactúen con el contenido a través de mapas, imágenes, videos, gráficos y textos explicativos, entre otros recursos fáciles de interpretar.

Investigación y colaboración: claves para el desarrollo del Atlas Antártico Argentino
Considerada prioritaria, el área del atlas sobre el sexto continente nace en 2020 como respuesta a la convocatoria del Programa de Investigación y Desarrollo (PIDEFF) de la Secretaría de Investigación, Política Industrial y Producción para la Defensa. “Este atlas mantiene la línea editorial, el diseño conceptual y metodológico de Atlas Nacional Interactivo de Argentina (ANIDA)”, declara Analía Almirón. Y explica que el proyecto de investigación se realizó gracias a un equipo que incluyó, además de “seis profesionales del Instituto Geográfico Nacional (IGN), quienes contribuyen con su conocimiento especializado y experiencia en el continente blanco, además de su participación en la comunidad científica internacional”.

Además, subraya que, si bien el equipo central es pequeño (constituido por tres geógrafas y una diseñadora gráfica), se complementa con la colaboración de otras áreas del organismo (como Cartografía, Geografía y Relaciones Institucionales) y de expertos externos, cuya experiencia es esencial para garantizar la precisión y calidad del resultado final. “Nuestro objetivo es hacer que su contenido sea accesible a un público amplio, evitando el lenguaje técnico muy especializado, sin sacrificar la densidad de información y la definición de los conceptos clave”.
El primer paso, relata la coordinadora del proyecto, fue relevar las publicaciones existentes a nivel nacional y mundial, hecho que les permitió comprobar que nuestro país cuenta con información de calidad pero dispersa. “Sobre esta base, logramos armar un producto novedoso que incluye algo inédito: el trabajo realizado por la Argentina en los más de 100 años de presencia en el sector”.
Almirón revela que el IGN se está proponiendo generar una nueva cartografía que sea útil para la logística y la investigación, a la vez que permita dar respuesta a las necesidades de otros instituciones”. Y aclara que en la planificación participan diversos organismos como el Servicio de Hidrografía Naval (SHN), Servicio Geológico Minero Argentino (SEGEMAR), el Instituto Antártico Argentino (IAA), e incluso el Comando Conjunto Antártico (COCOANTAR) coordinados por el Instituto Geográfico Nacional (IGN).

Antártida Argentina: ejes temáticos, ciencia y logística
El atlas se estructura en 16 ejes temáticos que abarcan cuatro áreas: ciencias de la tierra, ciencias sociales y humanas, ciencias de la vida y ciencias ambientales. “Los ejes que ya están disponibles son historia antártica argentina (desde los pioneros hasta la actualidad); bases antárticas (que más allá del objetivo científico común, son muy distintas entre sí); transporte y logística; geomorfología (muestra las diferentes regiones del sexto continente y las formas glaciarias, entre otros) y oceanografía (donde podemos conocer las corrientes marinas, las barreras de hielo, etc.).
A modo de ejemplo, el link referido a las instalaciones científicas argentinas no sólo habla de la historia de cada base, su fundación y las actividades que se realizan, sino que permite hacer un recorrido visual a través de vídeos, fotos e incluso recoge el testimonio de miembros de las dotaciones presentes. Uno de sus aspectos más atrapantes es recorrer cada una de las bases, su ubicación y las instalaciones que la componen, ver a la gente trabajando y realizando las tareas de apoyo logístico pertinentes. “El objetivo de este año es abrir un nuevo eje sobre glaciología, hidrología y permafrost, del que ya tenemos una versión preliminar”, manifiesta Almirón.

A la cartografía topográfica tradicional, en 2020 y 2023 se le sumó la información lograda a través de vuelos aerofotogramétricos (fotografías aéreas que permiten realizar mediciones y obtener información espacial precisa) realizados con drones. “Ya se relevaron las bases Marambio y Esperanza y, en la campaña 2024-2025, se voló sobre Carlini”, señala la coordinadora del proyecto, quien este año tuvo la oportunidad de viajar a la Antártida y validar en el terreno la información elaborada en gabinete.
Del papel a la era digital, una herramienta digital para explorar la Argentina
El Instituto Geográfico Nacional (IGN) cuenta con una sólida tradición en la creación de atlas en papel con un enfoque didáctico y educativo.
En este contexto, surge una nueva línea de atlas geográfico nacional: el Atlas Nacional Interactivo de Argentina (ANIDA), que es el primer atlas geográfico nacional digital de la República Argentina, publicado en internet y de acceso público.

Esta herramienta realizada por el IGN recopila conocimientos científicos en diversas áreas de la geografía argentina y “ofrece información geoespacial, textos y recursos multimedia, entre otros materiales que resultan sumamente valiosos para docentes, estudiantes, investigadores, profesionales y tomadores de decisiones”.
“A diferencia del atlas en papel, la información no se presenta por provincias, sino por ejes temáticos trabajados desde la escala nacional: Argentina y el mundo, Argentina físico-natural, Argentina socio-demográfica, Argentina económica y Argentina ambiental. Estos ejes se desarrollan en diversos temas y cuenta con la incorporación de una perspectiva bicontinental al incorporar información y datos sobre la Antártida.

Como proyecto educativo, ANIDA busca transformarse en una herramienta accesible a todos. Si bien desde el inicio del diseño y desarrollo de estas publicaciones, la meta era llegar al público más amplio posible, con el tiempo, se comprobó que los principales usuarios son docentes y estudiantes de niveles medio y superior, mientras que en el nivel primario su uso se facilita con la guía de un docente. Para ello, dice Almirón, “se están editando fascículos temáticos descargables con contenidos del atlas para su uso sin conexión, además de proporcionar guías de orientación, en formato de video y descarga, con propuestas para el trabajo en el aula”.

Más allá de los mapas, innovación en la difusión del conocimiento geoespacial
En ANIDA utilizan plataformas digitales de sistemas de información geográfica (SIG) que ofrecen servicios de mapeo de información geográfica y permiten integrar distintas clases de contenidos elaborados para las publicaciones.
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Estas plataformas, accesibles en cualquier dispositivo, tienen características similares y permiten integrar diferentes clases de contenidos. “Para este tipo de publicaciones, necesitamos crear mapas que permitan visualizar y consultar información geoespacial, además de introducir contenido de texto, fotografías, infografías, etc., entre otras herramientas que faciliten llegar a la información que, de otro modo, solo sería accesible para los especialistas”, puntualiza la responsable.