En un duro documento, en el que expresa el dolor y la preocupaciรณn de la sociedad por el crecimiento del narcotrรกfico, la Conferencia Episcopal Argentina convoca a la dirigencia a construir โamplios consensos que deriven en polรญticas pรบblicas de corto, mediano y largo alcanceโ.
Reunidos en Pilar en su 106ยบ Asamblea Plenaria, los obispos argentinos hicieron un desesperado llamado de atenciรณn sobre el flagelo de las adicciones en nuestro paรญs. Durante la presentaciรณn del documento, titulado El drama de la droga y el narcotrรกfico, el titular de la Conferencia Episcopal y arzobispo de Santa Fe, Monseรฑor Josรฉ Marรญa Arancedo, seรฑalรณ que el tema โcompete a todas las regiones pastorales del paรญsโ y que es vivido por los prelados โcon mucha preocupaciรณnโ. Por su parte, el responsable de la Pastoral Social y obispo de Gualeguaychรบ, Monseรฑor Jorge Lozano, reconociรณ en diรกlogo con la prensa que โhay cada vez mรกs consultas en las parroquiasโ de parte de jรณvenes adictos y se nota โla incidencia de algunos grupos armados en los barrios perifรฉricosโ.
UNA SOCIEDAD ANGUSTIADA
โNos quedamos sin palabras ante el dolor de quienes lloran la pรฉrdida de un hijo por sobredosis o hechos de violencia vinculados al narcotrรกficoโ, aseguraron los prelados reunidos en Pilar. Alertaron que โcuando este mal se instala en los barrios destruye las familias, siembra miedo y desconfianza entre los vecinos, aleja a los chicos y a los jรณvenes de la escuela y el trabajoโ, y algunos de ellos โtarde o temprano son capturados como ayudantes del negocioโ. El nivel de degradaciรณn que produce el narcotrรกfico es graficado en el ejemplo de โgente que vende droga para sobrevivir, sin advertir el grave daรฑo que se realiza al tejido social a y los pobres en particularโ.
El documento hace especial hincapiรฉ en la expansiรณn โalarmanteโ de las drogas sintรฉticas, distribuidas en espacios festivos y generadoras de โconductas autodestructivas en adolescentes y jรณvenesโ. Al profundizar en las causas profundas del grave flagelo de las adicciones, los obispos consideran que se trata de โun emergente de la crisis existencial del sentido de la vida en que estรก sumergida nuestra sociedadโ, que โse refleja en el deterioro de los vรญnculos sociales y en la ausencia de valores trascendentesโ.
CORRUPCIรN Y CONNIVENCIA
โLa Argentina estรก corriendo el riesgo de pasar a una situaciรณn de difรญcil retornoโ, alertan los obispos, al tiempo que advierten que โsi la dirigencia polรญtica y social no toma medidas urgentes costarรก mucho tiempo y mucha sangre erradicar estas mafias que han ido ganando cada vez mรกs espacioโ. Los obispos ponen tambiรฉn el foco de sus crรญticas en โla complicidad y la corrupciรณn de algunos dirigentesโ que han permitido la actual โsituaciรณn de desbordeโ, al tiempo que destacan la recurrente sospecha de la sociedad respecto de la presunta connivencia de miembros de las fuerzas de seguridad, funcionarios de la Justicia y polรญticos que โcolaboran con los grupos mafiososโ, una realidad que โdebilita la confianza y desanima las expectativas de cambioโ. โEl desafรญo es enorme y extorsiรณn de los grupos criminales es grandeโ, aรฑaden. Sin embargo, al referirse al necesario compromiso de toda la sociedad en la soluciรณn del problema, califican de โfuncional y cรณmpliceโ a โquien pudiendo hacer algo, se desentiende, se lava las manos y mira para otro ladoโ.
La Iglesia reconoce la labor que desempeรฑan distintos centros educativos, clubes barriales y organizaciones no gubernamentales (ONG) que โcolaboran en la educaciรณn, prevenciรณn y asistencia a las vรญctimasโ. Haciendo un examen de conciencia hacia adentro de la instituciรณn, la Conferencia Episcopal destaca la โardua tareaโ que desarrolla en las distintas diรณcesis โla pastoral de adicciones, promoviendo la contenciรณn de familias, el acompaรฑamiento y la reinserciรณn social de los adictosโ, aunque los obispos admiten no hacer sido โsuficientemente eficaces en promover una pastoral que convoque y contenga a los adolescentes y jรณvenesโ.
“QUE NO NOS ROBEN LA ESPERANZA”
โLa complejidad de este tema es tal que solo serรก abordado eficazmente por medio de amplios consensos sociales que deriven en polรญticas pรบblicas de corto, mediano y largo alcanceโ, concluyen los obispos, quienes recogen โla preocupaciรณn por la desprotecciรณn de nuestras fronteras y por la demora en dotar de adecuados sistemas de radar a las zonas mรกs vulnerablesโ. Sin perder de vista la responsabilidad de los diferentes actores sociales en la atenciรณn de este problema de difรญcil soluciรณn, los prelados se encargan de subrayar que โperseguir el delito es tarea exclusiva e irrenunciable del Estadoโ.
โEsta situaciรณn estรก dejando un tendal de heridos que reclaman de parte de todos compromiso y cercanรญaโ, apuntan los obispos, quienes hacen un reconocimiento a โtodos los que buscan una respuesta sin bajar los brazosโ, entre los que menciona a las madres, padres, amigos, comunicadores sociales, docentes, sacerdotes, miembros de las fuerzas de seguridad y funcionarios que โresisten la extorsiรณn de las mafiasโ. โNo dejemos que nos roben la esperanza, ni que se la arrebaten a nuestros jรณvenesโ, es la convocatoria final del documento, en el que los obispos llaman a trabajar por โuna cultura del encuentro y la solidaridad como base de una revoluciรณn moral que sostenga una vida mรกs dignaโ.