El hijo dilecto de Muammar al-Gaddafi, Saif al-Islam, fue condenado a muerte in absentia por reprimir las protestas pacíficas en el país en 2011.
La corte también dictó, en una sesión televisada, una sentencia de muerte por fusilamiento contra el ex jefe de inteligencia de Gaddafi, Abdullah al-Senussi, y contra su ex primer ministro Baghdadi al-Mahmoudi.
Ocho ex funcionarios recibieron condenas a muerte y otros siete fueron condenados a 12 años de prisión cada uno, de acuerdo al reporte de la cadena de televisión al-Nabaa. Otros cuatro fueron absueltos. Todos los acusados, a excepción de al-Islam, están bajo custodia judicial.
El veredicto sobre al-Islam fue emitido “en ausencia”, ya que está retenido por un grupo rebelde contrario al Gobierno de Trípoli, que no es reconocido por las potencias mundiales.
El juicio comenzó en abril del 2014 antes de los enfrentamientos entre facciones rivales en Trípoli que dividieron en Libia, en una lucha de poder que ha dado pie a dos gobiernos que compiten por la autoridad central.
Fuente: Reuters Latinoamérica
