Recep Tayyip Erdogan, el actual presidente y hombre fuerte de Turquía desde 2003. / Foto: AFP

El premier Erdogan pidió la intervención de Naciones Unidas y la Liga Árabe para poner fin a la represión policial en Egipto, que califica de “gran amenaza para la paz” en el país árabe.

“El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y la Liga Árabe deben encabezar la comunidad internacional y moverse para poner fin de inmediato a esta masacre”, indica un comunicado difundido en la web del jefe de Gobierno, Recep Tayyip Erdogan. “El primer ministro ha hablado en los días pasados con el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y con los miembros permanentes del Consejo de Seguridad para poner en marcha un proceso democrático y evitar posibles masacres; esta iniciativa de Turquía continuará”, señala el texto.

Poco antes, el presidente de Turquía, Abdullah Gül, había calificado de “inaceptable” la muerte en Egipto de decenas de seguidores del depuesto presidente Mohamed Mursi por la intervención policial. “Lo que sucede en Egipto es lo que temíamos y que hemos intentado prevenir mediante numerosos llamamientos”, dijo Gül en una breve declaración en el aeropuerto de Estambul hecha antes de viajar a Azerbaiyán y transmitida en directo por la cadena NTV. “La intervención armada contra civiles que únicamente se manifiestan es inaceptable”, reiteró.

“Egipto se dirige hacia el caos, y esto es un callejón sin salida”, advirtió el presidente, al tiempo que reiteró la amistad de Turquía con “el “pueblo egipcio” y pidió que los detenidos fueran liberados. “Todo el mundo debería iniciar un proceso de encuentro democrático”, añadió, y “todo el mundo musulmán debe mostrar su reacción contra los sucesos”.

Horas antes, el ministro turco de Cultura, Ömer Çelik, había sido el primer representante de Ankara en condenar la intervención del Ejército en El Cairo, que calificó de “masacre cometida ante los ojos de todos”. Çelik había utilizado en una serie de mensajes en su cuenta de Twitter palabras más duras que el presidente, al calificar de “crisis moral” el que “las instancias internacionales” se limitasen a “condenar” la intervención y permanecieran simplemente observando lo que calificó de “matanza”.

Fuente: EFE