En Santiago del Estero, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner dejó inaugurado un nuevo radar que integra el Programa de Radarización Escudo Norte. Casi 300 efectivos de las Fuerzas Armadas serán los encargados de su control y manejo.
Con la inauguración de un radar primario 3D, en el aeropuerto Vicecomodoro Angel Aragonés, de la capital de la provincia de Santiago del Estero, la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner puso en marcha el Programa de Radarización Escudo Norte y el lanzamiento del Plan Fortín II. La iniciativa implica la implantación de 20 radares para combatir el narcotráfico en la región norte del país. “Son dos los combates que tenemos que dar contra la delincuencia; se combate en el frente militar y en el frente político, social y económico”, sostuvo la primera mandataria, junto a la ministra de Seguridad, Nilda Garré, el titular de Defensa, Arturo Puricelli, el gobernador Gerardo Zamora, autoridades civiles y militares y frente a cientos de efectivos de las distintas fuerzas de seguridad e invitados especiales. El objetivo es reforzar los controles que se realizan a través del Operativo Fortín I, vigente desde 2009 y con la habilitación de su segunda versión que implica el fortalecimiento del control del espacio aéreo del NOA-NEA argentino, bajo el Comando Operacional del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas.
Con los medios existentes para realizar dicha tarea, se sumaron el radar primario de alcance medio (Rame 3D) para la vigilancia y control, fabricado por la empresa estatal INVAP, en Río Negro y una estación de vigilancia e interceptación para detectar vuelos ilegales y control del movimiento de aeronaves que ingresen o salgan del espacio aéreo; veinte radares Rasit de corto alcance, con sus comunicaciones y transmisión; una sección de dos aeronaves interceptoras Pucará; cuatro helicópteros; un avión de transporte F-27; un helicóptero C-182 de apoyo para tareas de búsqueda y salvamento y una aeronave de reconocimiento fotográfico Lear-35. En total, estarán destacados 270 efectivos (90 de la Fuerza Aérea Argentina y 180 del Ejército Argentino) que tendrán a su cargo el control de las comunicaciones, el proceso de la información del sistema de vigilancia aérea y tareas de pilotaje. En su discurso, la presidente también expresó que ambos proyectos representan “la articulación inteligente entre el ministerio de Defensa y las Fuerzas Armadas y el ministerio de Seguridad y sus fuerzas de seguridad, en la lucha y prevención contra el narcotráfico”. A la vez, destacó que el radar está hecho en la Argentina y que es uno de los 26 que se instalarán para control militar y civil reacondicionados y modernizados. “Es uno de los 10 países del mundo capaces de producir radares. Me siento orgullosa de que una maquinaria de ese nivel haya podido ser construida aquí en la Argentina por ingenieros y técnicos al servicio de la seguridad”, concluyó. El flamante radar forma parte del Sistema Nacional de Vigilancia y Control Aeroespacial que se creó por un decreto firmado en 2004 por el entonces presidente Néstor Kirchner.