Las construcciones de la base antártica siguen avanzando y podría agilizar muchas operaciones logísticas entre Argentina y el Continente Blanco.

Dentro de la Antártida, Argentina cuenta con varias bases estratégicas para facilitar y crear distintas operaciones logísticas que varían desde lo militar hasta investigaciones científicas. Una de las últimas novedades es el proyecto en la Base Petrel, donde se está buscando modernizar sus instalaciones para tener muelles y pistas de aterrizaje que permitan una entrada al continente más directa y fácil.

¿Cuáles son los objetivos del proyecto en la Base Petrel?

Según Martín Sakamoto, jefe de la Base Petrel, la idea es que esta nueva entrada sea polimodal. Es decir, que tenga dos tipos de acceso: marítimo y aéreo. Esto la diferencia de otras bases y se convierte en un punto aún más estratégico para aviones y buques que puedan auxiliar o cooperar en las distintas misiones y operaciones que tenga la base conjunta.

El jefe de la Base Petrel, Martín Sakamoto, cuenta los nuevos avances del proyecto.

Además, se está trabajando en la instalación de una casa modular habitacional térmica y sustentable en conjunto con TANDANOR, una empresa estatal y naval. Se trata de la casa principal de la base y su objetivo principal será el de la investigación científica.

Por otro lado, a través de nuevos protocolos ambientales se recuperaron y sanearon las habitaciones de la antigua casa Petrel que habían sido destruidas en el incendio que sucedió en 1974.

Los planos del nuevo proyecto de la Base Petrel.

¿Qué protocolos ambientales se llevaron a cabo para recuperar la casa Petrel?

La nueva casa contaría con un sistema de energías alternativas, convirtiéndola en una de las casas más modernas del Sistema Antártico Internacional. “Durante el verano construimos uno de los campos de paneles solares fotovoltaicos más grande que tiene la base antártica”, recalca Sakamoto. En el próximo verano, está previsto que se llegue a 576 paneles y esto reduciría el consumo de combustible fósil.

El campo de paneles solares de la base antártica que suministra energías renovables.

Por otro lado, se instalaron dos grupos electrógenos de 160 KVA y otros dos de 130 KVA en la usina auxiliar. Según el jefe de la base antártica, se tuvo que realizar toda la instalación eléctrica para que estos grupos puedan abastecer y llegar a cada punto donde hay que llevar energía en la base.  “Es un salto cualitativo y de calidad lo que hemos conseguido este año”, explica Sakamoto, refiriéndose a los avances de electricidad.

En términos ambientales y junto a estos nuevos avances, lograron mejorar la obtención, potabilización y redistribución del agua en la Base Petrel. Para esto, hubo una inserción de una laguna, distinta a la ya existente, para poder afrontar el invierno y poder seguir innovando en las propuestas y protocolos ambientales.