El líder de la Liga Musulmana de Pakistán (PML-N), quien fue derrocado en 1999, logró un sólido triunfo en las elecciones parlamentarias.
Sharif no ha logrado suficientes escaños para gobernar en solitario, pero ha ganado el peso suficiente para evitar tener que formar coalición con sus principales rivales, el partido Tehrik-i-Insaf (PTI) del ex jugador de criquet Imran Khan, y el Partido Popular de Pakistán (PPP) del actual presidente Asif Alí Zardari, viudo de Benazir Bhutto. Imran Khan dio una dura lucha y probablemente seguirá siendo la principal figura de la oposición. El PPP, que gobernó los últimos cinco años, quedó relegado a un lejano tercer lugar.
El primer nombramiento de Sharif fue el de Ishaq Dar como ministro en el nuevo gabinete. Dar, quien fue responsable de Finanzas en un gabinete previo de Sharif en la década de 1990, ha dicho que planea presionar a los gobiernos provinciales para cobrar impuestos agrícolas, una política que podría llevarlo a enfrentarse con algunos partidarios acaudalados de la Liga Musulmana de Pakistán (PML-N). Ha sugerido que estaría dispuesto a implementar algunas reformas políticamente sensibles exigidas por el Fondo Monetario Internacional (FMI) para asegurar miles de millones de dólares para mantener la economía a flote. Dar, un contador, negoció un paquete con el FMI en 1998. Sin embargo, dijo a Reuters en una entrevista reciente que el PML-N no estaba buscando aún ayuda del organismo y que cualquier acuerdo “tendrá que ser adecuado para el país”.
Fuente: Reuters