Con 85 votos a favor y 41 en contra, el Parlamento catalán inició el proceso que conduciría hacia un referéndum para decidir el futuro político de esa comunidad autónoma española.
La iniciativa legislativa, presentada por la coalición gobernante Convergència i Unió (CiU) del presidente catalán Artur Mas, recibió el apoyo de sus aliados de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y del bloque Iniciativa per Catalunya-Els Verts/Izquierda Unida. Los votos favorables sumaron 85.
Se opusieron el Partido Popular (PP), la coalición “Ciutadans” y el Partido Socialista de Catalunya (PSC). Sin embargo, dentro del PSC, cinco diputados rompieron la disciplina partidaria y respaldaron el referéndum. También votó dividida la “Candidatura d’Unitat Popular” (CUT), uno de cuyos diputados lo hizo a favor mientras que los otros dos se abstuvieron.