La Sociedad Militar Seguro de Vida junto a la editorial Taeda presentaron en el Regimiento de Granaderos a Caballo una obra que honra la heroica gesta del Libertador a través del género novela gráfica. De la redacción. Fotos: Guillermo Llamos
Con motivo de los 200 años del cruce de los Andes, Sociedad Miliatar Seguro de Vida y la editorial Taeda publicaron el libro Bicentenario del Cruce de los Andes. Historias ilustradas de la gesta sanmartiniana. La obra, editada en gran formato, rescata datos históricos y los presenta en forma de historieta, e incluye recursos gráficos como infografías para lograr una lectura rigurosa pero amena.
“La idea es llevar a San Martín a la mayor cantidad posible de gente”, explicó Gustavo Gorriz, director editorial de la obra, durante la presentación, que tuvo lugar en el Regimiento de Granaderos a Caballo. “La Argentina tiene por delante una gesta casi tan importante como la que ideó San Martín”, añadió. Gorriz destacó además el compromiso de Taeda con la Argentina y “con la generación de una agenda para el país”.
El libro es el resultado del esfuerzo mancomunado de un equipo de trabajo heterogéneo, formado por Andrea Estrada (editora), Armando Fernández (guionista), Sergio Ibáñez (ilustrador), Ezequiel Abásolo (asesor histórico), Ignacio Bello (infógrafista), Rocío Fernández (letrado), Sergio Toyos (especialista en militaría). Además, el equipo contó con el asesoramiento especializado del general Diego Soria, expresidente del Instituto Nacional Sanmartiniano.
La editora del proyecto, Andrea Estrada, celebró el trabajo de este “equipo de primer nivel” y brindó detalles de por qué se eligió el formato de novela grafica, que tiene una larga historia en nuestro país y que sigue despertando interés en la actualidad. “Son doce capítulos independientes, que combinan realismo vívido con rigurosidad histórica”, detalló. La obra busca reflejar el derrotero de San Martín y su gente. “El cruce de los Andes es una gesta de pasión, de esfuerzo, de liderazgo y también de profesionalismo”, concluyó Estrada.
Por su parte, Ezequiel Abásolo, destacó la importancia de la gesta sanmartiniana para la nacionalidad argentina. “Es muy necesario en estos días saber recordar quién fue San Martín y cuál fue su misión”, subrayó. Durante su relato, el especialista cautivó al público presente con un repaso por algunas curiosidades históricas de la vida y la obra del prócer.
El jefe del Regimiento de Granaderos, coronel Oscar Armanelli, fue el encargado de dar cierre al encuentro. “La gesta del cruce fue la hazaña de un pueblo. Con su liderazgo creó y concibió el plan continental, pero fue esa nación en ciernes la que le brindó al Libertador la posibilidad de llevar la libertad a medio continente”, expresó.
En dialogo con el equipo
Andrea Estrada, doctora en Lingüística, docente universitaria, editora, correctora y miembro del CONICET.
Es presidenta de la asociación PLECA (Profesionales de la lengua española correcta de la Argentina) y autora de La tragedia según el discurso. Así se siente Cromañon, Panorama de los estudios de la evidencialidad en el español. Teoría y práctica y Columnatas en fuga. “El libro combina rigurosidad histórica con el realismo vívido de las historietas”
¿Cómo fue para usted como editora coordinar un equipo de trabajo tan diverso?
Realmente fue un gran placer, nos entendimos a la perfección desde el primer momento. A veces, la tarea más difícil del editor con grupos de trabajo en el que intervienen muchas personas, es hacer cumplir los tiempos de entrega. Si se atrasa uno, se atrasan todos. Por ejemplo, si el ilustrador no entrega las ilustraciones, la letrista no puede acomodar los parlamentos en los globos, la diseñadora se atrasa en la maquetación, la correctora no puede corregir y así sucesivamente. Pero esto no sucedió. Montamos una maquinaria editorial perfectamente aceitada.
¿Por qué optaron por el formato de novela gráfica para el libro?
Nos pareció que era un género apto para hacer llegar la gesta sanmartiniana a un público amplio, chicos y grandes, legos y especialistas, en el sentido de que nos permitía combinar la rigurosidad histórica con el realismo vívido de los personajes de historietas.
¿Qué desafíos particulares plantea este formato para el editor?
El desafío más difícil fue controlar los detalles. Podría decirse que una obra de este tipo es una sumatoria de detalles que si están bien resueltos pasarán desapercibidos para los lectores.
Ezequiel Abásolo, abogado, doctor en Derecho y en Ciencia Política, profesor de Historia y especialista en Derecho Militar.
Es Vicedirector 2.° del Instituto de Investigaciones de Historia del Derecho y miembro correspondiente por la Provincia de Buenos Aires de la Academia Nacional de Historia. “El Cruce fue una expresión sudamericana y binacional”
¿Por qué hacer un libro del Bicentenario del cruce de los Andes y por qué hacerlo con estas características tan particulares?
Las dos cosas están vinculadas. San Martín es de esos temas que todos creemos que sabemos pero que no están tan trabajadas. Hay muchas cosas producidas, pero todavía queda mucho por hacer. Además, esto no es un libro de investigación de base, es una mezcla: tiene un libreto artístico muy bueno, un diseño gráfico excelente, hay infografías, pero todo esto se apoya en erudición. La idea fue aprovechar los datos existentes y traducirlos en un lenguaje no solamente accesible, sino gráfico, que es el nuevo lenguaje de los tiempos.
¿Cómo hacer para dimensionar la magnitud y la relevancia de la gesta sanmartiniana?
Hay una infografía muy buena sobre esto. Siguiendo la proporción de lo que el ejército de los Andes significó en relación al resto de la población de la época, trasladado a la actualidad, el ejército de San Martín debería tener medio millón de soldados.
Por otra parte, el Cruce fue una expresión sudamericana y binacional. Cuando Chile cayó en manos de los realistas, en Cuyo recibieron exiliados chilenos, entre 3.000 y 4.000, y después muchos de ellos volvieron con el Ejército.
Lo más importante, en la Argentina de hoy, marcada por la desazón, por la mediocridad, queremos transmitirle a la gente que hubo una época en la que estábamos objetivamente mucho peor y se pudieron afrontar desafíos con éxito.
Sergio Toyos, Asesor histórico.
Es oficial retirado del Ejército, muséologo, historiador militar, escritor y periodista. Es miembro del Instituto Argentino de Historia Militar. “El Cruce fue el primer paso para una independencia efectiva”
¿Cómo fue trabajar en este proyecto sobre la gesta sanmartiniana?
Hace unos cuantos años que estoy vinculado a la editorial Taeda, donde siempre me he sentido muy cómodo y he sido valorado profesionalmente. Siento que el trabajo que hacemos tiene eco y es un placer hacerlo de esta forma. Todo el equipo ha disfrutado realmente este trabajo que ha sido, para todos nosotros, una experiencia maravillosa.
¿Qué fue lo que intentaron transmitir de esa gesta que significó el cruce de los Andes?
El cruce de los Andes fue, tal vez, el primer paso para independizarnos en forma efectiva. Cuando se lanzó la campaña, hacía poco menos de un año de la declaración de independencia. De hecho, el propio San Martín había apurado la celebración del Congreso de Tucumán para poder tener el respaldo político para emprender su campaña con un sentido estratégico y táctico. Todo eso hemos intentado trasmitirlo en un formato accesible a todo tipo de público. En todas las reuniones de trabajo que tuvimos, se notó que estaba todo muy bien aceitado y que el objetivo que buscaba la editorial lo amasábamos entre todos para lograr que saliera un muy buen producto. El resultado está a la vista.
Armando Fernández, Guionista de historietas, escritor y periodista.
Trabajó para la editorial Columba desde 1965 a 2000 y en otras editoriales nacionales. Se desempeñó durante 20 años como redactor del periódico Soldados del Ejército Argentino. Es autor de cuarenta libros, entre ellos Malvinas. Historias ilustradas. “Quise transmitir al San Martín humano”
¿Qué sensaciones le genera este nuevo libro?
Haber trabajado en este libre es, para mí, el sueño del pibe. Yo tengo una larga experiencia en historieta y he publicado alrededor de 5000 guiones. Últimamente me he dedicado también a la historieta histórica y me quedaba la frustración de no haber podido reflejar la gesta sanmartiniana. Taeda me brindó la oportunidad de poder hacerlo con un magnífico grupo de personas, con las que hemos trabajado apuntando hacia la excelencia. En mi vasta experiencia de historietista nunca había visto un proyecto de esta magnitud.
¿Cuáles son los aspectos que buscaron transmitir de la figura de San Martín?
Como guionista, aparte de abordar los detalles históricos, quise transmitir al lector el San Martín humano, la intimidad del prócer. Más allá del San Martín guerrero, de ese gran soldado y militar visionario que fue, lo que quisimos mostrar fue su relación con Remedios, el hombre que besa a su mujer o ese episodio en el que tiene a su beba recién nacida en brazos. El lector se va a encontrar con un excelente panorama de la gesta histórica, pero también con esos momentos de calidez, de intimidad, como cuando San Martín encarga a las mujeres de los Andes que le confeccionen una bandera y ellas, que eran jovencitas de 14 o 15 años, se ponen inmediatamente a trabajar.
Sergio Ibáñez, ilustrador e historietista.
Realizó sus primeras colaboraciones en la mítica editorial Columba. Es autor de Metahumorfosis, Gatillo Fácil, La Guarida del gusano blanco de Bram Stoker, y coautor con Armando Fernández de La hermandad del oráculo. Actualmente dibuja la serie Dago para la editorial italiana Aurea. También participó en Malvinas. Historias ilustradas. “San Martín es un héroe de mi infancia”
¿Qué lo motivó a embarcarse en este proyecto?
El proyecto surge a partir de Armando Fernández, con quien trabajo desde hace más de 20 años. A mí la figura de San Martín me atrae desde chico, yo en carnaval me disfrazaba de Granadero. Es un héroe de mi infancia.
¿Cuál fue el mayor desafío de participar en este libro?
El mayor desafío del proyecto fue el tiempo, sin dudas, pero salió. Y por otra parte, en cuanto a San Martín, fue darle la encarnadura humana, sacarlo del bronce.
¿Cómo mantener el rigor histórico y a la vez le el atractivo que este formato requiere?
Yo no soy un historiador o un especialista en historia militar, pero trabajé en base a la documentación que aportaron los expertos del equipo, todo fue muy chequeado.
¿Con qué se va a encontrar el lector cuando abra el libro?
La idea es que se lea como una película, una miniserie, que el lector se meta adentro de la historia. El libro es hermoso como objeto y eso ayuda mucho.