El 13 de diciembre de 1907, se produjo el descubrimiento del primer pozo productor de petróleo en Comodoro Rivadavia, un acontecimiento que marcó el inicio de la historia de los hidrocarburos en nuestro país.
En “Mosconi, petróleo para los argentinos”, libro de Jorge Victoriano Alonso y José Luis Speroni publicado por Editorial TAEDA, se cita el recuerdo del entonces coronel Enrique Mosconi -quien sería posteriormente director general de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF)- de esa fecha emblemática. Aquí, un pequeño fragmento del libro:
“Un equipo de la Dirección General de Minas realizaba perforaciones en busca de agua potable en las inmediaciones del pueblo de Comodoro Rivadavia, un alejado y pobre lugar patagónico. Se había hecho ya una perforación sin resultados, hallándose el equipo en el mes de noviembre en las tareas iniciales para un nuevo pozo, en el que el 10 de diciembre llegaba al máximo de la capacidad teórica de su máquina, que era de 500 metros, recibiendo entonces el jefe de sondeo, don José Fuchs, orden de llevar la profundidad del pozo hasta el máximo posible, siempre que no hubiera peligro de roturas.
Y así fue como en el día de Santa Lucía del año 1907 llegaba la perforación hasta los 530 metros, y entonces fue cuando se halló el petróleo. Los encargados de los trabajos dieron cuenta a sus superiores del feliz hallazgo, en un telegrama que firmaron Fuchs y Beghin, perforador y jefe de sondeo uno y auxiliar del equipo el otro.
Aquel pozo en el que estaban trabajando Fuchs y Beghin, con toda su gente, había sido iniciado en el año 1903, pero al llegar a los 135 metros de profundidad los trabajos debieron suspenderse por no contar aquellos hombres con las máquinas necesarias para la obra. En aquellos años todo llevaba mucho tiempo, demasiado, y recién en 1907, el 24 de marzo de 1907, ya con una máquina nueva se pudieron reiniciar los trabajos que dieron el resultado que sabemos”.
El 14 de diciembre de 1907, luego de conocerse los resultados de esa perforación en Comodoro Rivadavia, el Gobierno Nacional presidido por José Figueroa Alcorta publicaba un decreto por el cual quedaba “prohibida la denuncia de pertenencias mineras y concesión de permiso de cateos en el Puerto de Comodoro Rivadavia, Territorio del Chubut, en un radio de 5 leguas kilométricas, a todo rumbo, contándose desde el centro de la población”.
De esa forma, tal como afirmaría Figueroa Alcorta en su discurso de inicio de sesiones del Congreso del 1º de mayo de 1908, el gobierno intervenía suspendiendo los permisos de cateo (tal como se conoce en nuestro Código de Minería al derecho a explorar en búsqueda de minerales), “a fin de estudiar la extensión e importancia de la napa petrolífera, su rendimiento y aplicación, y como consecuencia, la forma de explotación mas ventajosa al interés público”.