En su discurso en ocasión del festejo del aniversario de Israel, la embajadora en Argentina, Dorit Shavit, destacó que la creación de ese Estado implicó “la realización de un sueño por el que lucharon miles de generaciones”.
“Israel se convirtió en un sueño hecho realidad, un Estado para todos y cada uno de los judíos”, señaló la embajadora del país en Argentina, Dorit Shavit, durante la recepción realizada en la legación diplomática para festejar los 65 años de la creación del Estado de Israel. Recordó que se trata de “un país pequeño en cuanto a población y territorio”, “rico en arqueología, pero pobre en recursos naturales” y que, sin embargo, aprovechó el “potencial humano” y “forzó a los desiertos a rendirse y florecer”.
La diplomática citó, como ejemplos de este desarrollo que se centra en la tecnología, la “increíble productividad agrícola” y la atracción de inversores de todo el mundo que han decidido establecer en este país sus centros de investigación. “Los starts-up israelíes han sido cruciales para compañías como Google, Microsoft, Motorola, Intel, Cisco y muchas más”, puntualizó.
Shavit aseguró que el proceso de paz con los palestinos será el “mayor desafío” del Parlamento que acaba de constituirse tras las últimas elecciones. “La paz para Israel no es sólo una elección estratégica; es un llamamiento moral que deriva de nuestra herencia”, agregó.
En cuanto a las históricos vínculos con la Argentina, la embajadora recordó que, tras ser reconocido en 1949 como 59º miembro de Naciones Unidas, pasaron solamente veinte días antes de que se establecieran formalmente las relaciones diplomáticas entre ambos países. Llamó a “ampliar cada vez más esos vínculos”, de manera de intensificar los lazos de cooperación entre ambos Estados.